Las expresiones vertidas por María Inés Pérez Corral en donde acusó que el origen de la candidatura a diputación federal de Jesús Ibarra representan las críticas emanadas desde la militancia morenistas por la simulación de un proceso democrático para seleccionar a los abanderados.
Desde que apareció la lista de propuestas por el partido a nivel local, la cual fue presuntamente basada en consulta ciudadana, surgieron los descontentos.
El pecho de la funcionaria no es bodega, y con anterioridad había criticado el arribismo en las filas del partido, pero no se quedó contenta con indirectas así que decidió esgrimir directamente su inconformidad, con todas sus palabras, siendo la única morenista que salió a tratar de ser congruente con sus ideas.
¿Jesús es arribista? Si bien es cierto que en un principio alcanzó un curul local por el Partido Nueva Alianza también fungió como asesor de Jesús Estrada Ferreiro en la alcaldía de Culiacán. En realidad ha sido un empresario de la política.
Posteriormente llegó al congreso ya con la bandera guinda, gracias a su hermano. Sin embargo, y tomando en cuenta que las candidaturas están fundamentadas en encuestas, el diputado se anotó para la alcaldía de la capital pero resultó seleccionado para una diputación.
Todo esto la secretaria María Inés lo fundamentó con el hecho de que el hermano del diputado, Germán Ibarra Ramos, es el secretario particular de Mario Delgado, dirigente nacional de Morena, ni más ni menos.
Este asunto no es cualquier cosa, a tal grado que de cierta forma el gobernador Rocha Moya ya se deslindó de los comentarios vertidos por la integrante de su gabinete, diciendo que por esa clase de comentarios el partido la podría sancionar, exponiendo a la dirigencia guinda que él no está detrás de los señalamientos.
El futuro de María Inés es incierto, pero surgen escenarios tanto negativos como positivos.
El presidente está por arribar al estado y bien podría llegar a un acuerdo directo con AMLO o cerrar la caja de Pandora y continuar al frente de la secretaría. Pero si Mario Delgado tiene la piel delgada, lo más probable es que se le sancione.
Cuen es priísta
Vaya desparpajo que se le creó a Héctor Melesio Cuén Ojeda por su renuncia a la militancia del Partido Sinaloense y su inscripción al PRI, pues se le vio como un personaje que solamente busca un cargo político.
Si bien es cierto que se trata de un tema administrativo, para poder ocupar la plurinominal a la diputación federal, la simplificación de este asunto lleva indefectiblemente a la crítica, pues la sociedad está cansada de políticos que brincan de un partido a otro sin previo aviso .
Ahí está Chuy Valdés que renuncia al PRI, se va a Morena donde no lo quiere la militancia y ahora aparece triunfante por el partido Verde. Ese gatopardismo ramplón es lo cuestionable.
Lo mismo el PAS que fue con Morena primero y ahora con los priístas. Todo sea por el poder.
