/ miércoles 14 de julio de 2021

“Jalón de orejas” ¿Es la solución?

Funcionarios del Ayuntamiento y servidores públicos encargados de verificar que se apliquen los protocolos sanitarios en los establecimientos, recibieron de nueva cuenta un jalón de orejas por parte del alcalde, Luis Guillermo Benítez Torres, pues éste asegura que se cometieron varias irregularidades durante el fin de semana, cosa que no le gustó.

Dijo que él personalmente anduvo supervisando y haciendo recorridos por la ciudad, y de las irregularidades que encontró su personal no le informó nada, por lo que remató diciendo que si se confiaba de sus trabajadores, todo sería un caos.

Todo, afirmó, está respaldado en fotografías y videos, por lo que ayer lunes citó a todos los directores de todas las dependencias en la sala de Cabildo.

Agregó que miró muchos lugares que son muy concurridos y ningún inspector o autoridad se acercó para supervisarlos, así como en el transporte popular, aurigas y pulmonías, observó a los pasajeros sin cubre bocas y a una delegación de Vialidad y Transporte muy tibia que no está cumpliendo lo que prometió.

Mientras tanto, Eloy Ruiz Gastelum, coordinador de Protección Civil, aseguró, que a pesar de las siete actas administrativas, ningún negocio superó los aforos permitidos, hasta lo destacó. Sus declaraciones se contradijeron con las del alcalde ¿Será uno de los funcionarios al que le jalen las orejas?

Además informó que se entregaron mil 200 cubrebocas en la franja costera, aunque eso no quiere decir que la gente no lo use, añadió, sino que si lo traen pero guardado en su bolsa; entonces de qué sirve regalarlos, si seguramente también irán a parar a los bolsillos.

Lo mejor, han expresado muchos ciudadanos, es que se aplique mano dura con multas o sanciones para quien no porten su cubre bocas en espacios públicos, pues las personas entienden por las malas cuando se les da donde más les duele: su economía; sin embargo la máxima autoridad municipal reiteró que no se ven en la necesidad de llegar a esos extremos, ni siquiera porque ya vio como está la realidad.

Así que mientras el municipio gasta en acciones que al parecer son innecesarias, llamadas "concientización", y la gente siga guardando el cubre bocas en sus bolsillos, los contagios seguirán aumentando. ¿Son los jalones de oreja la solución?

SEGURIDAD EN CRUCE FERROVIARIO

Con fecha 2 de julio, la Secretaría de Obras Públicas del gobierno del estado publicó en Compra Net-Sinaloa el concurso de licitación pública de la obra “Dispositivos de Seguridad en el Cruce Ferroviario Avenida Mario Huerta (carretera Habal Cerritos)”, con un presupuesto base de 5 millones 146 mil 620 pesos.

Al parecer, será una de las últimas obras que el presente sexenio ejerza en Mazatlán, que por cierto, a palabras del subsecretario Cuauhtémoc Rosales Inzunza, este puerto ha absorbido entre el 40 y 45% de la inversión total en obra pública a nivel estatal.

De acuerdo al concurso OPPU-EST-LP-048, la obra empezará el 13 de agosto y terminará el 31 de octubre del presente año, es decir, 80 días naturales a partir de la fecha de inicio.

Los recursos que se ejercerán son del Programa de Inversión Pública Estatal 2021, que serán liberados a través de la Secretaría de Administración y Finanzas del gobierno del estado.

Las empresas interesadas tendrán su visita al sitio de la obra el 19 de julio y el día 21 será la junta de aclaraciones.

Si se toma en cuenta que el 95% o más de las obras que se han realizado en el puerto durante la presente administración son contratistas locales del estado o de Mazatlán, lo más seguro es que la instalación de dispositivos de seguridad en el cruce ferroviario Habal-Cerritos, será una empresa sinaloense, ya que como dijo el subsecretario de Obras Públicas, salvo la remodelación del estadio Teodoro Mariscal y otras obras que no son de gran magnitud fueron hechas por constructoras foráneas.

Así que desde principio hasta fin, podemos decir que para bien del puerto, el gobernador Quirino Ordaz Coppel siempre vio por su terruño.

Funcionarios del Ayuntamiento y servidores públicos encargados de verificar que se apliquen los protocolos sanitarios en los establecimientos, recibieron de nueva cuenta un jalón de orejas por parte del alcalde, Luis Guillermo Benítez Torres, pues éste asegura que se cometieron varias irregularidades durante el fin de semana, cosa que no le gustó.

Dijo que él personalmente anduvo supervisando y haciendo recorridos por la ciudad, y de las irregularidades que encontró su personal no le informó nada, por lo que remató diciendo que si se confiaba de sus trabajadores, todo sería un caos.

Todo, afirmó, está respaldado en fotografías y videos, por lo que ayer lunes citó a todos los directores de todas las dependencias en la sala de Cabildo.

Agregó que miró muchos lugares que son muy concurridos y ningún inspector o autoridad se acercó para supervisarlos, así como en el transporte popular, aurigas y pulmonías, observó a los pasajeros sin cubre bocas y a una delegación de Vialidad y Transporte muy tibia que no está cumpliendo lo que prometió.

Mientras tanto, Eloy Ruiz Gastelum, coordinador de Protección Civil, aseguró, que a pesar de las siete actas administrativas, ningún negocio superó los aforos permitidos, hasta lo destacó. Sus declaraciones se contradijeron con las del alcalde ¿Será uno de los funcionarios al que le jalen las orejas?

Además informó que se entregaron mil 200 cubrebocas en la franja costera, aunque eso no quiere decir que la gente no lo use, añadió, sino que si lo traen pero guardado en su bolsa; entonces de qué sirve regalarlos, si seguramente también irán a parar a los bolsillos.

Lo mejor, han expresado muchos ciudadanos, es que se aplique mano dura con multas o sanciones para quien no porten su cubre bocas en espacios públicos, pues las personas entienden por las malas cuando se les da donde más les duele: su economía; sin embargo la máxima autoridad municipal reiteró que no se ven en la necesidad de llegar a esos extremos, ni siquiera porque ya vio como está la realidad.

Así que mientras el municipio gasta en acciones que al parecer son innecesarias, llamadas "concientización", y la gente siga guardando el cubre bocas en sus bolsillos, los contagios seguirán aumentando. ¿Son los jalones de oreja la solución?

SEGURIDAD EN CRUCE FERROVIARIO

Con fecha 2 de julio, la Secretaría de Obras Públicas del gobierno del estado publicó en Compra Net-Sinaloa el concurso de licitación pública de la obra “Dispositivos de Seguridad en el Cruce Ferroviario Avenida Mario Huerta (carretera Habal Cerritos)”, con un presupuesto base de 5 millones 146 mil 620 pesos.

Al parecer, será una de las últimas obras que el presente sexenio ejerza en Mazatlán, que por cierto, a palabras del subsecretario Cuauhtémoc Rosales Inzunza, este puerto ha absorbido entre el 40 y 45% de la inversión total en obra pública a nivel estatal.

De acuerdo al concurso OPPU-EST-LP-048, la obra empezará el 13 de agosto y terminará el 31 de octubre del presente año, es decir, 80 días naturales a partir de la fecha de inicio.

Los recursos que se ejercerán son del Programa de Inversión Pública Estatal 2021, que serán liberados a través de la Secretaría de Administración y Finanzas del gobierno del estado.

Las empresas interesadas tendrán su visita al sitio de la obra el 19 de julio y el día 21 será la junta de aclaraciones.

Si se toma en cuenta que el 95% o más de las obras que se han realizado en el puerto durante la presente administración son contratistas locales del estado o de Mazatlán, lo más seguro es que la instalación de dispositivos de seguridad en el cruce ferroviario Habal-Cerritos, será una empresa sinaloense, ya que como dijo el subsecretario de Obras Públicas, salvo la remodelación del estadio Teodoro Mariscal y otras obras que no son de gran magnitud fueron hechas por constructoras foráneas.

Así que desde principio hasta fin, podemos decir que para bien del puerto, el gobernador Quirino Ordaz Coppel siempre vio por su terruño.