Culiacán, Sin. -Para los eldoradenses y sobre todo para los que trabajan en actividades relacionadas a la caña, es una noticia con un amargo sabor difícil de dirigir, la cual apenas el 30 de abril pasado detonó, cuando desde las oficinas del Ingenio, salió un comunicado dirigido a las organizaciones de productores: después de 124 años de incesante trabajo, la última factoría azucarera de todo el noroeste del país, cesará sus actividades industriales y comenzará a revisar el término de las relaciones con sus agremiados.
Durante esa noche, nadie pudo confirmar la información, en el documento se establecía que la empresa Ingenio Eldorado SA de CV, propiedad del conglomerado Grupo Azucarero Mexicano (GAM), mantiene una deuda de 854 millones de pesos insolventable, un bajo rendimiento de los cultivos de caña, una superficie cada vez menor de siembras y una sequía prolongada, lo que obligaba a los socios a suspender sus actividades. Nada más.
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Esto provocó que durante el desfile del Día del Trabajo, se esparciera la desazón y el desconcierto, por lo que algunos agremiados comenzaron a señalar que defenderán esta fuente de empleo y polo económico de esta región que pronto será el municipio 19 de Sinaloa.
Testimonios de la lucha que viene
Los agricultores de caña, obreros y residentes de Eldorado se encuentran señalan que pasarán de la incertidumbre de la noticia del posible cierre, a socializar el tema para conseguir apoyos de cualquier tipo.
El maestro e historiador Julio Mendívil Félix, uno de los personajes que ha escrito cientos de páginas sobre el Ingenio y sus trabajadores, señala que buscarán la forma de activar una lucha.
“Si el ingenio deja de operar, será un golpe para el municipio emergente, ya que es la fuente de trabajo directo e indirecto de más de 2 mil personas”, comenta en entrevista.
No nada más son los obreros, que trabajan dentro de la planta azucarera, también están los que siembran las tierras, quienes trabajan con ellos y los negocios locales que obtienen la derrama del emporio industrial del dulce.
Historia de intentos de cierre
Mendívil cuenta que la primera piedra del Ingenio fue colocada hace más de 100 años, el 28 de marzo de 1900, y en sus mejores tiempos, contaba con una capacidad para producir 600 toneladas de azúcar diarias.
Para 1903 se dio la primera zafra y continuó de manera interrumpida, pero de 1996 a 1997 las cosechas de caña fueron destinadas para el ingenio de Costa Rica, otro coloso azucarero que terminó en la ruina por la diversificación de los cultivos, que dejaron la caña, así como una mala gestión financiera.
Pero para Mendivil Félix, en aquella década de los 90, se buscó beneficiar Costa Rica para que Eldorado cerrara, situación que no se consiguió, porque el que terminó cerrado fue el Rosales.
Los problemas han sido históricos, enfatiza, pues a principios de 1970 Eldorado fue declarado en quiebra, pero logró continuar el funcionamiento con el apoyo del gobierno estatal y federal, por medio de la Operadora Nacional de Ingenios.
“El ingenio lleva arrastrando un rezago de 854 millones de pesos, a inicios del nuevo siglo (2001) hubo otro problema similar, pero se logró salvar. Siempre ha estado en la cuerda floja con el posible cierre”, comenta Mendívil Félix.
Amarga noticia
El posible cierre del Ingenio ha vuelto a alertar a los pobladores de Eldorado desde la semana pasada, cuando cañeros y trabajadores recibieron el comunicado del cese de labores.
En el desfile por El Día del Trabajo salieron a marchar con lonas que pedían evitar el cierre de las instalaciones. Mientras que algunos agricultores como José Vidal Jiménez Acosta ven con preocupación esto, debido a que ya invirtieron en la siembra de caña.
“Entre mi familia y yo tenemos 40 hectáreas, ya se cosecharon algunas pocas, pero estábamos regando y fertilizando, alistando para la próxima cosecha y zafra. Lo grave es que si ya sabían de esto los directivos, ¿por qué no avisaron con antelación para no invertir este año?”, se duele.
Jiménez Acosta comenta que para poder tener una hectárea de caña es necesario invertir entre 45 a 65 mil pesos, espera a que los representantes del ingenio azucarero se reúnan con los productores de caña para ver cómo se atenderán las pérdidas, ya que en todo el noroeste de México es la única planta en la que se hace azúcar.
La procesadora más cercana está en Nayarit, aunque afirma que sería incosteable hacer los transportes de la materia prima hasta el vecino estado.
Los factores
Julio Mendívil dice que en el comunicado se afirmaba que se volvió insolvente la deuda que arrastra el ingenio, aunado a esto la falta de agua para los cultivos, el cambio climático y la falta de capacidad para producir caña en el sector son algunos factores que se suman a los motivos del cierre.
“Luego también tuvimos la noticia de que México va a dejar de exportar más de 100 mil toneladas a Estados Unidos, eso también hay que tomarlo en cuenta”, señala.
El también cronista del pueblo comenta que entre obreros y personal administrativo, son 500 personas las que laboran en el ingenio; sumados a estos están los agricultores, operadores de máquinas, transportistas y jornaleros; en total estima que 2 mil residentes de Eldorado son quienes llevan el sustento a sus casas derivado de las actividades azucareras.
Esta problemática alerta incluso a los candidatos a la presidencia municipal de la aún sindicatura. Jesús Camberos Castro, candidato de la coalición Fuerza y Corazón por Sinaloa, indica que en caso de concretarse el cierre del ingenio, el municipio emergente será golpeado por una ola de desempleo, ya que esta es una de las principales actividades económicas de la región.
“Lo que se necesita es una mesa de diálogo con autoridades federales para ver cómo se puede salvar. La gente sí trabaja en otras cosas como la pesca, pero es notorio que la producción de camarón ha bajado y pues allí también hay un gran rezago”, expuso.
La última zafra
Rafael trabajó durante 40 años en el ingenio, hoy está jubilado; él se encargaba de empaquetar y amarrar los costales de azúcar y afirma que esta es una fuente de trabajo para su familia, ya que aún tiene parientes que laboran en ella.
Al igual que el resto de los pobladores, teme que Eldorado no vuelva a llenarse de cenizas que manchan de tizne con el cierre del ingenio. Por lo pronto, representantes sindicales y cañeros se reunirán en Veracruz para dialogar respecto a la problemática, en busca de evitar el cierre.