/ lunes 28 de diciembre de 2020

El PIB sinaloense (500 mil mdp para 2019) debe crecer al 4% anual

El pasado 09 de diciembre el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) dio a conocer los resultados del “Producto Interno Bruto por Entidad Federativa 2019”, principalmente con la finalidad de analizar la dinámica de las entidades federativas y su participación en el Producto Interno Bruto (PIB) nacional.

Groso modo podemos decir que el PIB es el principal indicador del comportamiento de una economía nacional, muy sintéticamente lo podemos definir como el valor total de los bienes y servicios producidos por una nación, y el símil con una empresa privada podría ser el crecimiento o decrecimiento de sus ventas finales.

En el 2019 las entidades federativas con mayor aportación al PIB fueron, de mayor a menor, las siguientes: La Ciudad de México (16.1%), el Estado de México (8.8), Nuevo León (8.0), Jalisco (7.1), Veracruz (4.5), Guanajuato (4.2), Coahuila (3.7), Baja California (3.5), Chihuahua (3.5), Sonora (3.4) y Puebla (3.3), que de manera conjunta contribuyeron con el 66.1% del PIB nacional. Prácticamente son los mismos que lideraron el 2018, y en ambos años Sinaloa ha contribuyó al PIB nacional con un 2.2 por ciento.

Si tomamos en cuenta que el PIB nacional para el 2019 fue de 23,012,426 millones de pesos, el 2.2 por ciento aportado por los sinaloenses equivale exactamente a 506,273 millones de pesos. Es importante subrayar que Sinaloa en este año ocupó el tercer lugar nacional en crecimiento del PIB respecto al 2018, con un 2.3 por ciento de crecimiento, sólo superado por Tlaxcala (5.6%) y Colima (4.6). Pero 2019 fue en general un año económicamente malo para el país pues tuvimos una recesión del 0.1 por ciento a nivel nacional.

Pero hay que decirlo claro, Sinaloa no puede seguir con niveles de crecimiento que rondan el 2 por ciento anual, llevamos así cerca de dos décadas o más, y seguiremos debatiéndonos en la mediocridad si no hacemos algo extraordinario para salir de esta inercia. Para empezar, debemos proponernos mínimamente doblar esa cifra, crecer a un 4 por ciento y que la creación de empleos formales comience a superar los 30 mil nuevos puestos de trabajo por año.

Debemos fortalecer los motores de los sectores secundario y terciario y no sólo destacar por nuestro aporte al sector primario de la economía, que nos enorgullece, pero a la par requerimos detonar también las ramas e industrias de mayor valor agregado. Nos lo reconoce con mucha claridad el comunicado oficial del INEGI: “Durante 2019, el PIB de las actividades primarias integradas por la agricultura, cría y explotación de animales, aprovechamiento forestal, pesca y caza alcanzaron 828,217 millones de pesos, cifra en la que Jalisco contribuyó con la mayor proporción con 13.3 por ciento, le siguieron Michoacán 10.4% y Sinaloa 8%” en los tres primeros lugares. Destacamos en el sector primario, pero éste sólo representa el 11 por ciento del PIB estatal sinaloense.

Si bien estos son los números de las economías estatales en 2019, todos sabemos que las cifras de 2020 serán históricamente malas, de recesión para todas las entidades al repartirnos un decrecimiento nacional pronosticado muy cerca del 10 por ciento. La cifra total de empleos perdidos por la pandemia rondará el medio millón de plazas y estaremos a la expectativa de que el sector privado pueda absorver el crecimiento del 15 por ciento al salario mínimo así como la revisión a la figura del outsourcing, y no se incremente más el desempleo, como ha sido el (mal) augurio de algunos especialistas.

El crecimiento o rebote que se pronostica para la economía mexicana para el año que inicia es del 3.5 por ciento y 4.2 para la de Estados Unidos, con quienes tenemos cerca del 80 por ciento de nuestro comercio exterior. Esperemos que esos números se cumplan y a la par la vacunación contra el Covid-19 acelere la recuperación de los mercados.

En la plataforma electoral del Partido Sinaloense (PAS) para la elección del 2021, que hemos titulado SINALOA QUIERE….., nos hemos planteado precisamente como agenda mínima de gobierno, promover un reimpulso de la economía sinaloense bajo las tres siguientes vertientes: 1) Un sector primario competitivo y con mayor valor agregado, 2) Un sector secundario más vigoroso y con mayor peso específico en la economía, y 3) Un sector terciario próspero, moderno y vanguardista.

Sólo con una economía en crecimiento significativo y no inercial, podemos aspirar a dinamizar todo el potencial de nuestra región, crear más y mejores empleos, y hacer de Sinaloa una región con mayores oportunidades para todos.

Un abrazo muy afectuoso y feliz año 2021.

El pasado 09 de diciembre el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) dio a conocer los resultados del “Producto Interno Bruto por Entidad Federativa 2019”, principalmente con la finalidad de analizar la dinámica de las entidades federativas y su participación en el Producto Interno Bruto (PIB) nacional.

Groso modo podemos decir que el PIB es el principal indicador del comportamiento de una economía nacional, muy sintéticamente lo podemos definir como el valor total de los bienes y servicios producidos por una nación, y el símil con una empresa privada podría ser el crecimiento o decrecimiento de sus ventas finales.

En el 2019 las entidades federativas con mayor aportación al PIB fueron, de mayor a menor, las siguientes: La Ciudad de México (16.1%), el Estado de México (8.8), Nuevo León (8.0), Jalisco (7.1), Veracruz (4.5), Guanajuato (4.2), Coahuila (3.7), Baja California (3.5), Chihuahua (3.5), Sonora (3.4) y Puebla (3.3), que de manera conjunta contribuyeron con el 66.1% del PIB nacional. Prácticamente son los mismos que lideraron el 2018, y en ambos años Sinaloa ha contribuyó al PIB nacional con un 2.2 por ciento.

Si tomamos en cuenta que el PIB nacional para el 2019 fue de 23,012,426 millones de pesos, el 2.2 por ciento aportado por los sinaloenses equivale exactamente a 506,273 millones de pesos. Es importante subrayar que Sinaloa en este año ocupó el tercer lugar nacional en crecimiento del PIB respecto al 2018, con un 2.3 por ciento de crecimiento, sólo superado por Tlaxcala (5.6%) y Colima (4.6). Pero 2019 fue en general un año económicamente malo para el país pues tuvimos una recesión del 0.1 por ciento a nivel nacional.

Pero hay que decirlo claro, Sinaloa no puede seguir con niveles de crecimiento que rondan el 2 por ciento anual, llevamos así cerca de dos décadas o más, y seguiremos debatiéndonos en la mediocridad si no hacemos algo extraordinario para salir de esta inercia. Para empezar, debemos proponernos mínimamente doblar esa cifra, crecer a un 4 por ciento y que la creación de empleos formales comience a superar los 30 mil nuevos puestos de trabajo por año.

Debemos fortalecer los motores de los sectores secundario y terciario y no sólo destacar por nuestro aporte al sector primario de la economía, que nos enorgullece, pero a la par requerimos detonar también las ramas e industrias de mayor valor agregado. Nos lo reconoce con mucha claridad el comunicado oficial del INEGI: “Durante 2019, el PIB de las actividades primarias integradas por la agricultura, cría y explotación de animales, aprovechamiento forestal, pesca y caza alcanzaron 828,217 millones de pesos, cifra en la que Jalisco contribuyó con la mayor proporción con 13.3 por ciento, le siguieron Michoacán 10.4% y Sinaloa 8%” en los tres primeros lugares. Destacamos en el sector primario, pero éste sólo representa el 11 por ciento del PIB estatal sinaloense.

Si bien estos son los números de las economías estatales en 2019, todos sabemos que las cifras de 2020 serán históricamente malas, de recesión para todas las entidades al repartirnos un decrecimiento nacional pronosticado muy cerca del 10 por ciento. La cifra total de empleos perdidos por la pandemia rondará el medio millón de plazas y estaremos a la expectativa de que el sector privado pueda absorver el crecimiento del 15 por ciento al salario mínimo así como la revisión a la figura del outsourcing, y no se incremente más el desempleo, como ha sido el (mal) augurio de algunos especialistas.

El crecimiento o rebote que se pronostica para la economía mexicana para el año que inicia es del 3.5 por ciento y 4.2 para la de Estados Unidos, con quienes tenemos cerca del 80 por ciento de nuestro comercio exterior. Esperemos que esos números se cumplan y a la par la vacunación contra el Covid-19 acelere la recuperación de los mercados.

En la plataforma electoral del Partido Sinaloense (PAS) para la elección del 2021, que hemos titulado SINALOA QUIERE….., nos hemos planteado precisamente como agenda mínima de gobierno, promover un reimpulso de la economía sinaloense bajo las tres siguientes vertientes: 1) Un sector primario competitivo y con mayor valor agregado, 2) Un sector secundario más vigoroso y con mayor peso específico en la economía, y 3) Un sector terciario próspero, moderno y vanguardista.

Sólo con una economía en crecimiento significativo y no inercial, podemos aspirar a dinamizar todo el potencial de nuestra región, crear más y mejores empleos, y hacer de Sinaloa una región con mayores oportunidades para todos.

Un abrazo muy afectuoso y feliz año 2021.