/ martes 16 de noviembre de 2021

La desgraciada oposición

La tragedia de este país no se construye en exclusiva por los ganadores políticos: se construye con la ayuda de los derrotados. El triunfo de MORENA reventó cualquier intento de equilibrios. El país se volvió monocromático de la noche a la mañana. No hay lugar par el contraste. Todo es unilateral y monolítico.

La reconstrucción de un sistema de pesos y contrapesos es inviable en el corto o mediano plazo. Los perdedores no han perdido nada. Ellos siguen felices en la derrota. Las repetidas derrotas no terminan por llevarse a los que deben de retirarse. La Legión de los Mismos sigue donde mismo haciendo lo mismo. Basta analizar los casos del PRI y del PAN para entender que la tragedia nacional se está acelerando su proceso debido a los fallidos “liderazgos” que se mantienen incrustados como grasa abdominal en las entrañas del poder.

En el caso de Sinaloa, el PRI, en un abrir y cerrar de ojos, se convirtió en una rémora de MORENA -Al menos en el congreso del estado se comportan como la bancada Bis de Rubén Rocha- Los responsables de la derrota no sufrieron nada. Ricardo Madrid y Cinthia Valenzuela fueron protegidos con sendas plurinominal; Quirino Ordaz abrazó a la 4t con la esperanza de una embajada; varios de sus dirigentes están en calidad de desaparecidos; muchos otros brincaron a otros partidos y algunos siguen como miembros de la elite cobrando desde de palacio de gobierno al servicio de los nuevos colores que arrendan el edificio de Insurgentes Que se preocupen otros. Sus viandas seguirán llegando a raudales. El PRI no está muerto, pero está en calidad de zombi buscando carroña para sobrevivir.

Por mucho tiempo, el PRI coqueteó con la idea de cambiar de nombre al partido para ser aceptado como opositor. Hoy ya no lo necesita. Miles de priistas decidieron brincar al barco MORENA. Lograron cambiar el nombre de su partido, pero sumaron a una legión de fanáticos que ni el onanismo más puro tricolor llegaron a experimentar. La oposición no era para ellos. Lo suyo es el poder.

Del lado del PAN las cosas no pintan diferente. El sentido común, la decencia y la integridad supondrían que los dirigentes hubieran hecho lo correcto y retirarse con gracia. No fue así. Se aferró con más fuerza al cargo. Para él no hubo derrota. Juan Carlo Estrada y sus incapacidades permanecen en el cargo sin un mínimo de autocrítica. Para colmo de males, el múltiple plurinominal, Adolfo Beltrán declara que el PAN apoyará las iniciativas de Rocha para que no tenga pretexto. Renuncia de facto a su papel de oposición y pone la camiseta de “comparsa expectante” o de payaso (dirían algunos otros). El cambio de dirigencia en ese partido se encuentra a la vuelta de la esquina, pero de nada sirve. Es intrascendente el resultado. Sin importar quien gane la legión de los mismos seguirá exprimiendo esa vaca hasta llevarse la última plurinominal del municipio más pequeño de Sinaloa.

El PAS se rentó por un rato a la 4t. Héctor Melesio Cuen está ocupado acomodando a sus partidarios en cargos por todo el estado. El PAS es otra de las franquicias disponibles para Rubén Rocha. Tal vez la tarifa es más cara que la del PRI, pero tiene en su poder el contrato de arrendamiento en sus manos. El PAS volverá a la oposición cuando así lo considere necesario, pero, por el momento su prioridad es tomar por asalto la mayor cantidad de lugares en la nómina a cargo del erario.

Hoy MORENA tiene el poder, el Poder absoluto. Nadie le hace sombra. Las desgracias del PRI y del PAN no están en sus dirigentes. La desgracia es para los ciudadanos. Esos partidos renunciaron a su mandato de ser oposición. Les gusta más ser miniones. La falta de una oposición sensata y de altura puede tener serios resultados en el corto plazo.

Los supuesto sacrificados por la débale de sus partidos se encuentran en un frenesí de supervivencia. La prioridad es colarse en cualquier grita que el sistema les permita. Mientras unos piensan en caer como buitres sobre los restos de sus partidos para alimentarse de la carroña por el tiempo que sea posible, otros luchan a toda costa por colarse de cualquier forma en los gobiernos emanados por MORENA. Lo último que tienen en mente es construir desde y para la oposición

La lucha desde la oposición no es para las mentes y almas débiles, sobre todo si consideramos que muchos de los que asumirán el papel de oposición únicamente se han dedicado a vivir del erario. Los opositores se forjan al calor de las carencias. Ser opositor es no tener una red de protección o vivir en la incertidumbre constante, algo menos que imposible para los que hoy perdieron


Una sociedad es tan grande o exitosa como lo es la suma de sus componentes: Poder y oposición necesitan estar en equilibrio. Con una oposición reducida al mando de reducidos, el futuro político de Sinaloa no es nada halagador. La derrota no se llevó la podredumbre, la enquistó mucho más.

¿O usted que opina amable lector? ¿Hay buena oposición y opositores o estamos en manos de zombis en busca de carroña para seguir deambulando sin rumbo?

La tragedia de este país no se construye en exclusiva por los ganadores políticos: se construye con la ayuda de los derrotados. El triunfo de MORENA reventó cualquier intento de equilibrios. El país se volvió monocromático de la noche a la mañana. No hay lugar par el contraste. Todo es unilateral y monolítico.

La reconstrucción de un sistema de pesos y contrapesos es inviable en el corto o mediano plazo. Los perdedores no han perdido nada. Ellos siguen felices en la derrota. Las repetidas derrotas no terminan por llevarse a los que deben de retirarse. La Legión de los Mismos sigue donde mismo haciendo lo mismo. Basta analizar los casos del PRI y del PAN para entender que la tragedia nacional se está acelerando su proceso debido a los fallidos “liderazgos” que se mantienen incrustados como grasa abdominal en las entrañas del poder.

En el caso de Sinaloa, el PRI, en un abrir y cerrar de ojos, se convirtió en una rémora de MORENA -Al menos en el congreso del estado se comportan como la bancada Bis de Rubén Rocha- Los responsables de la derrota no sufrieron nada. Ricardo Madrid y Cinthia Valenzuela fueron protegidos con sendas plurinominal; Quirino Ordaz abrazó a la 4t con la esperanza de una embajada; varios de sus dirigentes están en calidad de desaparecidos; muchos otros brincaron a otros partidos y algunos siguen como miembros de la elite cobrando desde de palacio de gobierno al servicio de los nuevos colores que arrendan el edificio de Insurgentes Que se preocupen otros. Sus viandas seguirán llegando a raudales. El PRI no está muerto, pero está en calidad de zombi buscando carroña para sobrevivir.

Por mucho tiempo, el PRI coqueteó con la idea de cambiar de nombre al partido para ser aceptado como opositor. Hoy ya no lo necesita. Miles de priistas decidieron brincar al barco MORENA. Lograron cambiar el nombre de su partido, pero sumaron a una legión de fanáticos que ni el onanismo más puro tricolor llegaron a experimentar. La oposición no era para ellos. Lo suyo es el poder.

Del lado del PAN las cosas no pintan diferente. El sentido común, la decencia y la integridad supondrían que los dirigentes hubieran hecho lo correcto y retirarse con gracia. No fue así. Se aferró con más fuerza al cargo. Para él no hubo derrota. Juan Carlo Estrada y sus incapacidades permanecen en el cargo sin un mínimo de autocrítica. Para colmo de males, el múltiple plurinominal, Adolfo Beltrán declara que el PAN apoyará las iniciativas de Rocha para que no tenga pretexto. Renuncia de facto a su papel de oposición y pone la camiseta de “comparsa expectante” o de payaso (dirían algunos otros). El cambio de dirigencia en ese partido se encuentra a la vuelta de la esquina, pero de nada sirve. Es intrascendente el resultado. Sin importar quien gane la legión de los mismos seguirá exprimiendo esa vaca hasta llevarse la última plurinominal del municipio más pequeño de Sinaloa.

El PAS se rentó por un rato a la 4t. Héctor Melesio Cuen está ocupado acomodando a sus partidarios en cargos por todo el estado. El PAS es otra de las franquicias disponibles para Rubén Rocha. Tal vez la tarifa es más cara que la del PRI, pero tiene en su poder el contrato de arrendamiento en sus manos. El PAS volverá a la oposición cuando así lo considere necesario, pero, por el momento su prioridad es tomar por asalto la mayor cantidad de lugares en la nómina a cargo del erario.

Hoy MORENA tiene el poder, el Poder absoluto. Nadie le hace sombra. Las desgracias del PRI y del PAN no están en sus dirigentes. La desgracia es para los ciudadanos. Esos partidos renunciaron a su mandato de ser oposición. Les gusta más ser miniones. La falta de una oposición sensata y de altura puede tener serios resultados en el corto plazo.

Los supuesto sacrificados por la débale de sus partidos se encuentran en un frenesí de supervivencia. La prioridad es colarse en cualquier grita que el sistema les permita. Mientras unos piensan en caer como buitres sobre los restos de sus partidos para alimentarse de la carroña por el tiempo que sea posible, otros luchan a toda costa por colarse de cualquier forma en los gobiernos emanados por MORENA. Lo último que tienen en mente es construir desde y para la oposición

La lucha desde la oposición no es para las mentes y almas débiles, sobre todo si consideramos que muchos de los que asumirán el papel de oposición únicamente se han dedicado a vivir del erario. Los opositores se forjan al calor de las carencias. Ser opositor es no tener una red de protección o vivir en la incertidumbre constante, algo menos que imposible para los que hoy perdieron


Una sociedad es tan grande o exitosa como lo es la suma de sus componentes: Poder y oposición necesitan estar en equilibrio. Con una oposición reducida al mando de reducidos, el futuro político de Sinaloa no es nada halagador. La derrota no se llevó la podredumbre, la enquistó mucho más.

¿O usted que opina amable lector? ¿Hay buena oposición y opositores o estamos en manos de zombis en busca de carroña para seguir deambulando sin rumbo?