/ lunes 6 de marzo de 2023

Vanguardia en Libertad | Relaciones sanas

Como parte de nuestra existencia es fundamental relacionarnos con las demás personas fuera de nuestro círculo familiar, crear vínculos, ya sean de amistad o amorosos, sin embargo, no se nos ha enseñado a cómo sobrellevarlos.

Durante la vida se presentarán situaciones donde están fuera de nuestras manos, donde no sabremos o no estamos seguros de cómo actuar o qué hacer al respecto, ya sea por conflictos, malos entendidos, es por esto que aquí les comentaré algunas acciones que aplico para mejorar las relaciones de mi círculo social y amoroso, aunque evidentemente no soy una experta, pero, me ha funcionado y han hecho que las situaciones negativas se manejen de la mejor forma.

Lo más importante aquí es saber comunicarnos, darnos a entender con nuestras ideas, pensamientos, es tener la noción de cuándo poner límites y cuándo está bien decir “sí”.

Asertividad

¿Alguna vez han escuchado o leído esta palabra? Recuerdo que cuando estudiaba en la universidad, tocamos ese tema, y desde que entendí de lo que se trataba se ha convertido en una de mis palabras favoritas, me ha ayudado mucho para aplicarla en cualquier situación.

La asertividad se trata de la capacidad para expresar tus emociones, sentimientos, de una forma en la que dejes claro tu punto de vista, que lo que digas sea directo y sin que tengas la necesidad de afectar a la otra persona o de hacer menos sus sentimientos. Es entender la perspectiva de la otra persona y aceptar cuando estás cometiendo un error, y por supuesto, encontrar la manera de mejorarlo.

No suponer

Tengo que aceptar que mi mejor etapa fue mientras estudiaba la licenciatura en Comunicación y en clases o con maestros conocía o entendí que a veces estaba haciendo las cosas de la peor manera, fue ahí en una clase cuando leí “Los Cuatro Acuerdos” no estoy segura si ustedes ya tuvieron la oportunidad de echarle un ojo, pero si ya lo hicieron, ustedes me entenderán.

Parece que todo error que comete el ser humano es suponer en igual de preguntar, ya sea con la familia, con el novio e incluso con sus propios amigos, creyendo que lo saben todo y que tu verdad es la única que importa, pero, ese es el problema, que en las situaciones nosotros solo pensamos en algo y somos de mente tan cerrada que no comprendemos que no todos pensamos igual, por lo que tu razón es diferente a la de tu amigo o primo, y por consiguiente, cuando ocurren momentos de tensión, suelen tomarse las situaciones diferentes, sin la necesidad de que esté bien o mal, solo son dos puntos distintos.

Ahora bien, para lograr que tus relaciones sean sanas solo es cuestión de llevar una buena comunicación y aunque parezca que es difícil no es así, solo trata de ser más comprensivo y paciente, recuerda que no todos pasamos por lo mismo, cada quien tiene su propia historia, por lo que cada persona tiene sus maneras para superar o reaccionar ante las situaciones cotidianas.

Por lo mismo, es relevante que, cuando opines o expreses tus emociones o pensamientos sean de una manera en la que no dañes a nadie, porque entiende, no somos tontos para que se nos trate como tal.

Por otra parte, no minimices los sentimientos de los demás porque así como ellos te están entendiendo, lo menos que puedes hacer es comprender su situación y cómo se sienten.


Contacto:
m.elena.millan@elsoldesinaloa.com.mx

Como parte de nuestra existencia es fundamental relacionarnos con las demás personas fuera de nuestro círculo familiar, crear vínculos, ya sean de amistad o amorosos, sin embargo, no se nos ha enseñado a cómo sobrellevarlos.

Durante la vida se presentarán situaciones donde están fuera de nuestras manos, donde no sabremos o no estamos seguros de cómo actuar o qué hacer al respecto, ya sea por conflictos, malos entendidos, es por esto que aquí les comentaré algunas acciones que aplico para mejorar las relaciones de mi círculo social y amoroso, aunque evidentemente no soy una experta, pero, me ha funcionado y han hecho que las situaciones negativas se manejen de la mejor forma.

Lo más importante aquí es saber comunicarnos, darnos a entender con nuestras ideas, pensamientos, es tener la noción de cuándo poner límites y cuándo está bien decir “sí”.

Asertividad

¿Alguna vez han escuchado o leído esta palabra? Recuerdo que cuando estudiaba en la universidad, tocamos ese tema, y desde que entendí de lo que se trataba se ha convertido en una de mis palabras favoritas, me ha ayudado mucho para aplicarla en cualquier situación.

La asertividad se trata de la capacidad para expresar tus emociones, sentimientos, de una forma en la que dejes claro tu punto de vista, que lo que digas sea directo y sin que tengas la necesidad de afectar a la otra persona o de hacer menos sus sentimientos. Es entender la perspectiva de la otra persona y aceptar cuando estás cometiendo un error, y por supuesto, encontrar la manera de mejorarlo.

No suponer

Tengo que aceptar que mi mejor etapa fue mientras estudiaba la licenciatura en Comunicación y en clases o con maestros conocía o entendí que a veces estaba haciendo las cosas de la peor manera, fue ahí en una clase cuando leí “Los Cuatro Acuerdos” no estoy segura si ustedes ya tuvieron la oportunidad de echarle un ojo, pero si ya lo hicieron, ustedes me entenderán.

Parece que todo error que comete el ser humano es suponer en igual de preguntar, ya sea con la familia, con el novio e incluso con sus propios amigos, creyendo que lo saben todo y que tu verdad es la única que importa, pero, ese es el problema, que en las situaciones nosotros solo pensamos en algo y somos de mente tan cerrada que no comprendemos que no todos pensamos igual, por lo que tu razón es diferente a la de tu amigo o primo, y por consiguiente, cuando ocurren momentos de tensión, suelen tomarse las situaciones diferentes, sin la necesidad de que esté bien o mal, solo son dos puntos distintos.

Ahora bien, para lograr que tus relaciones sean sanas solo es cuestión de llevar una buena comunicación y aunque parezca que es difícil no es así, solo trata de ser más comprensivo y paciente, recuerda que no todos pasamos por lo mismo, cada quien tiene su propia historia, por lo que cada persona tiene sus maneras para superar o reaccionar ante las situaciones cotidianas.

Por lo mismo, es relevante que, cuando opines o expreses tus emociones o pensamientos sean de una manera en la que no dañes a nadie, porque entiende, no somos tontos para que se nos trate como tal.

Por otra parte, no minimices los sentimientos de los demás porque así como ellos te están entendiendo, lo menos que puedes hacer es comprender su situación y cómo se sienten.


Contacto:
m.elena.millan@elsoldesinaloa.com.mx