Pueblos de Navolato, como lo fue la tierra del extinto capo Amado Carrillo Fuentes, –El Guamuchilito- constituyen la prueba irrebatible de que el aviso a tiempo de las autoridades en caso de huracanes, tormentas u otros fenómenos, no sirve de mucho cuando se impone lo trágico de las omisiones en el mantenimiento de la infraestructura. El dren Cedritos que por décadas desbordó sus caudales, que cada vez que llueve atemoriza a los lugareños, impuso una inundación que los expulsó a todos en más de 70 viviendas durante tres días.
Fue tan grave lo que ocasionó “Norma”, que no bajaron los niveles, aunque no llegó el auxilio o como se supone que debiera.
El clamor del desazolve de esta vía no se escuchó, desde que Quirino Ordaz Coppel se enteró, pero que lo dejó como otras tantas promesas incumplidas, con las que les jugó el dedo en la boca a los sinaloenses.
A la altura del poblado de Yebavito, el canal Francisco Cañedo no pudo contener la fuerza de las corrientes y uno de sus bordos cedió en perjuicio de muchas familias a las que se les anegaron sus territorios.
Y en la cabecera central navolatense, en lo que se presume como el primer cuadro de la ciudad este mismo ducto, pegado a la casa donde vivió con sus padres el actual director de la Unidad de Protección Civil de Sinaloa, Aurelio Roy Navarrete, también anegó espacios familiares.
Por la calle Benito Juárez donde prosigue el cauce canalero, el fluido copioso de las precipitaciones pluviales que trajo la depresión tropical, hizo lo suyo. La gente se alarmó y pidió ayuda que tampoco apareció por ningún lado. Vivieron minutas u horas de terror que a nadie le importaron.
Precisamente al lado de donde se localiza uno de los supermercados de una amplia cadena del estado.
En esta sindicatura y en la de Villa Juárez, -donde también el campo pesquero Las Puentes, empantanó por el agua y lodo- sumaron fácil 2 mil 500 damnificados, según datos de la alcaldesa Margot Urrea que se erigió más bien como contadora de la tragedia, porque no se le notó la preocupación de gestionar en su momento, ante los gobiernos estatal y federal, labores de draga o para desazolvar las líneas del sistema de riego agrícola o de drenes, como en El Bolsón, rancho que contiguo a El Limoncito, que se inundó por el agua que tiró fuera el canal Antonio Rosales.
En las colonias del Rincón, y otras aledañas no quedaron entre el saldo oficial, a pesar de que las quejas de los pobladores que resintieron los daños, las hicieron públicas. Un afán de ocultar las cosas, se advirtió.
En Altata, la ausencia de energía eléctrica y la falta de rapidez para evacuar a los habitantes de Punta Yameto, puso en peligro las operaciones.
El argumento, es que a todos se les puso en alerta.
Más, las alarmas no son ni serán nunca suficientes si no se laboran en la regeneración o reparación de las redes distribuidoras de agua o de otras, que están azolvadas, como tampoco bastarán los apoyos económicos que se otorgan a quienes buscan reponer sus pertenencias cuando las perdieron todas, a causa de que las autoridades incurren en riesgosas omisiones.
Como las los cuatros personas que perdieron la vida, a causa del clima negativo, en otras latitudes del estado que recibieron el artero golpe de la depresión tropical “Norma”, jamás restañarán sus heridas.
Samuel García causa júbilo en Sinaloa.
Con la licencia que el gobernador de Nuevo León, Samuel García, pidió al Congreso de su estado, los directivos y militantes de Movimiento Ciudadano en la entidad, empezaron a interpretar con júbilo que prácticamente, tienen candidato a la Presidencia de la República.
La duda se despejó. Luego de que se arguyeron elementos de que los opositores dentro de la cámara local, que no saben más que criticar el mandatario, porque no les queda de otra –tantos los panistas como priistas-, le negarían su voto para que no participara en la contienda del 2024, los emecistas se fortalecieron en su proyecto.
Las huestes que dirige Sergio Torres Félix, no pudieron esconder el gusto de conocer la resolución de los legisladores neoloneses, que activó a quienes, en Sinaloa, están listos para buscar candidaturas a los distintos cargos de elección popular. Para ello ya cuentan con una estructura de comités y promotores de a pie que esperan la voz de arranque.
Omar López, a revisar “los muertos en el camino”.
Uno de los que se prepara para convertirse en abanderado a la Presidencia municipal de Angostura o al Congreso del Estado, es el delegado de Programas Federales, Omar López. El funcionario deberá revisar si no dejó “muertos” en el camino o fallas que por acción propia o de sus colaboradores de confianza, le pudieran cerrar el paso con obstáculos.
Evidentemente que tiene las simpatías y el respaldo de quien influirá en las decisiones finales, pero no debe “echar en saco roto” la integración de un expediente limpio y una hoja de vida que en algún instante alguien busque poner en tela de duda, porque no tardan en “soltarse los malignos”, ante la incursión de personajes distintos a los que proclamaron los fundadores de Morena.
