/ lunes 13 de mayo de 2024

Tiempos Político | INE, IEES y aspirantes, la gran decepción del proceso

Faltan 16 días para que culminen las campañas y sus actores no mandaron señales que despertaran el interés de los ciudadanos, porque las propuestas de quienes aspiran a los cargos de elección popular fueron pobres y en ciertos casos nulas, al grado de que los debates se limitaron a ser auténticos pleitos callejeros.

Ninguno de los partidos estuvo al nivel de los sinaloenses y ello hace que se imponga la sospecha de que aliados y contrarios, sean en realidad cómplices de lo que es uno de los procesos más grandes de la historia en el que se elegirán a más de 20 mil funcionarios en todo el país.

Los directivos del Instituto Nacional Electoral y del Instituto Electoral del Estado de Sinaloa, se comportaron con una ruindad asombrosa.

En vez de asumirse como serios organizadores de las elecciones federales y locales, se inclinaron los primeros a servir a los empresarios y a los opositores y los del segundo, a las autoridades del partido en el poder.

En otros tiempos, la promoción del voto era una constante para asegurar que la participación de los pobladores fuera copiosa y para que no dejara lugar a la duda, que tradicionalmente utilizan en su favor quienes pierden para intentar judicializar los comicios.

Es la apertura de la puerta a los alegatos sin fundamento de quienes carecen de la capacidad para triunfar en las urnas y el resultado lo llevan ante los tribunales en la intención de obtener mejores rajas en la mesa de negociaciones.

Porque al final, las elecciones son uno de los más atractivos y jugosos negocios de todos los que intervienen en esto.

Es escasa la movilidad que el personal del INE y del IEES despliegan para que exista un ambiente propicio para que se fortalezca la democracia. Es hora de que no hablan ni siquiera de los observadores electorales que se responsabilizan de vigilar que no haya trampas y de recolectar las evidencias que en algún momento se aportarán como pruebas.

No se conoce del mecanismo de sus nombramientos.

Además de muchas cosas que no promovieron los debates que se programaron se redujeron a formatos ridículos. No hubo reglas claras ni redes de difusión para que la gente supiera de las ofertas.

En todos los casos, erigieron arenas de lodo en los que se proclamaron victoriosos quienes más groserías dijeron y no quienes más proposiciones a la solución de los problemas aportaron.

A prácticamente dos semanas de que termine el proselitismo, las instituciones electorales y un amplio sector de pretensos a puestos populares, entre hombres y mujeres, causaron decepción.

A pesar de las ominosas sumas de dinero que derrocharon y que uno que otro, en diferentes casos, se echó a la bolsa, porque a un evento comicial no se va de oquis.

Por miedo, Enrique Inzunza rehuyó al debate

Por miedo a que le restregaran de frente las imputaciones como acosador de damas al no tener defensa alguna, Enrique Inzunza Cázarez se rehusó a participar en el debate entre aspirantes al Senado del 9 de mayo, mientras que por complicidad con este “morenista”, Jesús Valdez Palazuelos, del Verde Ecologista se le sumó a lo mismo tras evidenciarse que como político reafirmó su nivel de simple comparsa.

Luego Movimiento de Regeneración Nacional en Sinaloa, suspendió la presencia de cualquier de los dos integrantes de la fórmula, a través de su dirigente Jesús Guerrero, ante el temor de que los agobien con el fuego que les prepararon los opositores para lanzarles.

La decisión se tomó para privilegiar el escenario de control de daños, que a criterio de los operadores, las repercusiones serán menores si están ausentes del acto que se diseñó para exponer ideas y programas de trabajo, porque la mayoría de los actores los podrían arrollar con todo.

De cualquier manera Imelda Castro no es el problema, los debatientes al parecer iban o van por el ex secretario general de Gobierno, que carga con los señalamientos de Ana Karina Aragón Cutiño que lo llevó hasta las autoridades con señalamientos de hostigamiento.

La aprensión del ex funcionario y de la dirigencia del morenismo, se fundamentó en que los contendientes Paloma Sánchez del Frente Corazón por México, que aglutina al PRI, PAN, PRD y Partido Sinaloense, lo pudieran hacer pedazos en el encuentro.

Y especialmente el del Partido del Trabajo, Jesús Estrada Ferreiro quien es uno de los más belicosos contra quien asume que es su enemigo y que cuando fue alcalde de la capital del estado, le puso muchas “piedras en el camino” para que lo sacaran de la silla, como posteriormente sucedió.

Hay datos de que el ex edil trae una sed de venganza que le es imposible ocultar y le diría “cuantas son dos más dos”.

El hecho de resolver que no apareciera en el evento, no significa que no lo exhibirán en toda su plenitud, porque los que sí asistirán están dispuestos a no dejarlo ir limpio.

Este viernes se verá si determinaron acabar con una o las dos figuras.

La medida no pudo adoptarse de otro modo. Lo que están en juego en este proceso electoral localmente, no es solo el Congreso del Estado, las siete diputaciones federales y las 20 alcaldías, sino el poder estatal que todavía ostenta el gobernador Rubén Rocha Moya.

Este es uno de los argumentos que se asoman del por qué Imelda Castro se puso en su lugar y se negó a estar en la discusión de los temas que se incluyeron y en las ofertas que tienen.

El 28 del mes pasado, los ataques escogieron como blanco a Enrique Inzunza Cázarez y no tubo recursos para una contra ofensiva. Fue a recibir en el rostro lodo que no era para ella, lo que no es justo.

Además es de insistirse que ella, es de antemano, prospecta a la gubernatura y como la carrera para eso ya comenzó, no es lógico que se preste a “engordarle el caldo” a alguien que después del dos de junio, hará todo lo que esté en sus manos para exterminarla políticamente.

Sería muy riesgoso e infantil que actuará asi.

Particularmente cuando, el segundo de a bordo en la mancuerna del morenismo para la senaduría, y ex miembro del gabinete sinaloense, está prácticamente herido en la competencia actual.

En este episodio es muy lastimoso el papel de Jesús Valdez Palazuelos, del PVEM, que se degradó a lo más bajo, como encubridor.

Tal vez porque también tiene historias de este tipo con mezcla de una marca de chocolate. Y de aguacates, en la intención de lograr una entradita más de dinero.

¿Podrán ganar las damas que pelean por Culiacán?

Erika Sánchez, Sandra Martos y Victoria Sánchez, estelarizan a las tres mujeres que compiten por la alcaldía de Culiacán, a nombre del PRI, PAN, PRD y PAS; Movimiento Ciudadano, y Partido del Trabajo, respectivamente.

Contra Juan de Dios Gámez, de Morena; Julio César Osuna del Partido Verde Ecologista de México, y Jesús Tapia, de Encuentro Solidario.

Asemejan a una guerra de géneros de tres contra tres aunque cada quien va por su lado.

¿Será capaz alguna de las damas de superar la barrera y alcanzar el triunfo electoral, precisamente en la presente etapa en que la corriente del feminismo, la lucha por la igualdad de los derechos y la férrea acción por el empoderamiento femenil, está en boga?

Habrá que esperar a que se despeje las resolución del dos de junio y comprobar que la estrategia que desenvuelven los operadores contra las conductas machistas, realmente tiene un avance entre los pobladores que como espectadores se podrían transformar en piezas decisorias de este fenómeno mundial.

O ¿Será posible que ellas se unifiquen en un criterio político electoral para lograr lo que buscan?

De antemano, se dividieron al lanzarse desperdigadas.

Faltan 16 días para que culminen las campañas y sus actores no mandaron señales que despertaran el interés de los ciudadanos, porque las propuestas de quienes aspiran a los cargos de elección popular fueron pobres y en ciertos casos nulas, al grado de que los debates se limitaron a ser auténticos pleitos callejeros.

Ninguno de los partidos estuvo al nivel de los sinaloenses y ello hace que se imponga la sospecha de que aliados y contrarios, sean en realidad cómplices de lo que es uno de los procesos más grandes de la historia en el que se elegirán a más de 20 mil funcionarios en todo el país.

Los directivos del Instituto Nacional Electoral y del Instituto Electoral del Estado de Sinaloa, se comportaron con una ruindad asombrosa.

En vez de asumirse como serios organizadores de las elecciones federales y locales, se inclinaron los primeros a servir a los empresarios y a los opositores y los del segundo, a las autoridades del partido en el poder.

En otros tiempos, la promoción del voto era una constante para asegurar que la participación de los pobladores fuera copiosa y para que no dejara lugar a la duda, que tradicionalmente utilizan en su favor quienes pierden para intentar judicializar los comicios.

Es la apertura de la puerta a los alegatos sin fundamento de quienes carecen de la capacidad para triunfar en las urnas y el resultado lo llevan ante los tribunales en la intención de obtener mejores rajas en la mesa de negociaciones.

Porque al final, las elecciones son uno de los más atractivos y jugosos negocios de todos los que intervienen en esto.

Es escasa la movilidad que el personal del INE y del IEES despliegan para que exista un ambiente propicio para que se fortalezca la democracia. Es hora de que no hablan ni siquiera de los observadores electorales que se responsabilizan de vigilar que no haya trampas y de recolectar las evidencias que en algún momento se aportarán como pruebas.

No se conoce del mecanismo de sus nombramientos.

Además de muchas cosas que no promovieron los debates que se programaron se redujeron a formatos ridículos. No hubo reglas claras ni redes de difusión para que la gente supiera de las ofertas.

En todos los casos, erigieron arenas de lodo en los que se proclamaron victoriosos quienes más groserías dijeron y no quienes más proposiciones a la solución de los problemas aportaron.

A prácticamente dos semanas de que termine el proselitismo, las instituciones electorales y un amplio sector de pretensos a puestos populares, entre hombres y mujeres, causaron decepción.

A pesar de las ominosas sumas de dinero que derrocharon y que uno que otro, en diferentes casos, se echó a la bolsa, porque a un evento comicial no se va de oquis.

Por miedo, Enrique Inzunza rehuyó al debate

Por miedo a que le restregaran de frente las imputaciones como acosador de damas al no tener defensa alguna, Enrique Inzunza Cázarez se rehusó a participar en el debate entre aspirantes al Senado del 9 de mayo, mientras que por complicidad con este “morenista”, Jesús Valdez Palazuelos, del Verde Ecologista se le sumó a lo mismo tras evidenciarse que como político reafirmó su nivel de simple comparsa.

Luego Movimiento de Regeneración Nacional en Sinaloa, suspendió la presencia de cualquier de los dos integrantes de la fórmula, a través de su dirigente Jesús Guerrero, ante el temor de que los agobien con el fuego que les prepararon los opositores para lanzarles.

La decisión se tomó para privilegiar el escenario de control de daños, que a criterio de los operadores, las repercusiones serán menores si están ausentes del acto que se diseñó para exponer ideas y programas de trabajo, porque la mayoría de los actores los podrían arrollar con todo.

De cualquier manera Imelda Castro no es el problema, los debatientes al parecer iban o van por el ex secretario general de Gobierno, que carga con los señalamientos de Ana Karina Aragón Cutiño que lo llevó hasta las autoridades con señalamientos de hostigamiento.

La aprensión del ex funcionario y de la dirigencia del morenismo, se fundamentó en que los contendientes Paloma Sánchez del Frente Corazón por México, que aglutina al PRI, PAN, PRD y Partido Sinaloense, lo pudieran hacer pedazos en el encuentro.

Y especialmente el del Partido del Trabajo, Jesús Estrada Ferreiro quien es uno de los más belicosos contra quien asume que es su enemigo y que cuando fue alcalde de la capital del estado, le puso muchas “piedras en el camino” para que lo sacaran de la silla, como posteriormente sucedió.

Hay datos de que el ex edil trae una sed de venganza que le es imposible ocultar y le diría “cuantas son dos más dos”.

El hecho de resolver que no apareciera en el evento, no significa que no lo exhibirán en toda su plenitud, porque los que sí asistirán están dispuestos a no dejarlo ir limpio.

Este viernes se verá si determinaron acabar con una o las dos figuras.

La medida no pudo adoptarse de otro modo. Lo que están en juego en este proceso electoral localmente, no es solo el Congreso del Estado, las siete diputaciones federales y las 20 alcaldías, sino el poder estatal que todavía ostenta el gobernador Rubén Rocha Moya.

Este es uno de los argumentos que se asoman del por qué Imelda Castro se puso en su lugar y se negó a estar en la discusión de los temas que se incluyeron y en las ofertas que tienen.

El 28 del mes pasado, los ataques escogieron como blanco a Enrique Inzunza Cázarez y no tubo recursos para una contra ofensiva. Fue a recibir en el rostro lodo que no era para ella, lo que no es justo.

Además es de insistirse que ella, es de antemano, prospecta a la gubernatura y como la carrera para eso ya comenzó, no es lógico que se preste a “engordarle el caldo” a alguien que después del dos de junio, hará todo lo que esté en sus manos para exterminarla políticamente.

Sería muy riesgoso e infantil que actuará asi.

Particularmente cuando, el segundo de a bordo en la mancuerna del morenismo para la senaduría, y ex miembro del gabinete sinaloense, está prácticamente herido en la competencia actual.

En este episodio es muy lastimoso el papel de Jesús Valdez Palazuelos, del PVEM, que se degradó a lo más bajo, como encubridor.

Tal vez porque también tiene historias de este tipo con mezcla de una marca de chocolate. Y de aguacates, en la intención de lograr una entradita más de dinero.

¿Podrán ganar las damas que pelean por Culiacán?

Erika Sánchez, Sandra Martos y Victoria Sánchez, estelarizan a las tres mujeres que compiten por la alcaldía de Culiacán, a nombre del PRI, PAN, PRD y PAS; Movimiento Ciudadano, y Partido del Trabajo, respectivamente.

Contra Juan de Dios Gámez, de Morena; Julio César Osuna del Partido Verde Ecologista de México, y Jesús Tapia, de Encuentro Solidario.

Asemejan a una guerra de géneros de tres contra tres aunque cada quien va por su lado.

¿Será capaz alguna de las damas de superar la barrera y alcanzar el triunfo electoral, precisamente en la presente etapa en que la corriente del feminismo, la lucha por la igualdad de los derechos y la férrea acción por el empoderamiento femenil, está en boga?

Habrá que esperar a que se despeje las resolución del dos de junio y comprobar que la estrategia que desenvuelven los operadores contra las conductas machistas, realmente tiene un avance entre los pobladores que como espectadores se podrían transformar en piezas decisorias de este fenómeno mundial.

O ¿Será posible que ellas se unifiquen en un criterio político electoral para lograr lo que buscan?

De antemano, se dividieron al lanzarse desperdigadas.