Entre aplausos y gritos de “Sí se pudo, sí se pudo “ fue despedido en la catedral de Tlalnepantla el Arzobispo Carlos Aguiar Retes ante un lleno de feligreses, quien el próximo 5 de febrero será ungido como nuevo cardenal de la Arquidiócesis Primada de México; dijo que llega “lleno de esperanza”, a su nombramiento.
El cardenal pide a los fieles sus oraciones, puesto que espera el triple de trabajo por el tamaño y la dificultad que se concentra en el ministerio pastoral de la Ciudad de México.
En conferencia de prensa admitió que asume una Arquidiócesis gastada socialmente y la más grande del mundo con 9 millones de personas y 500 parroquias. Destacó que la iglesia tendrá que transitar a una nueva evangelización en su método y expresiones.
Es necesaria una iglesia misionera que no sólo atienda a los fieles que asisten a los templos, sino que salga al encuentro de todos.
Aguiar Retes anunció cero tolerancia para la pederastia; además habló de la Ley de Seguridad, de la cual está de acuerdo, con los derechos humanos bien establecidos. Dijo que hará un llamado a los feligreses a razonar su voto para el 2018, para que no se vayan por la primer propuesta que les presenten.
Mencionó que fue avisado de su nuevo nombramiento como Arzobispo de la Ciudad de México telefónicamente y después viajó a la Ciudad del Vaticano.
