Escuinapa.- En el municipio existe una vieja creencia que dice que a los niños que no son bautizados no se les debe llevar al mar, ríos, arroyos o cualquier otro cuerpo de agua, ya que son "atraídos" por quienes llaman el "Chan" del agua.
Una historia de estas es contada por los abuelitos escuinapenses, quienes narran que una niña fue llevada por el "Chan" del agua del arroyo Juana Gómez, el cual se encuentra en las orillas de la cabecera de este municipio.
Según lo que se cuenta de esta historia, fue a principios de la década de los 90's, cuando le sucedió esto a Chuyita, una niña de 9 años de edad, quien vivía con su familia en una humilde vivienda junto a este arroyo.
Era una mañana como cualquier otra, la mamá de Chuyita se encontraba lavando ropa en el cauce del arroyo, y la pequeña, quien era la mayor de sus hermanos, se encontraba jugando junto con ellos en la orilla del cuerpo de agua.
De pronto, los menores vieron una sombra que caminaba por debajo del agua y que a la vez les decía: “ven conmigo”.
Sus hermanos corrieron con miedo, pero Chuyita se quedó mirándola, de pronto su mamá llegó corriendo y la acogió entre sus brazos, se la llevó a su casa, y ya estando ahí, llenos de miedo todos los niños trataban de describir a su mamá lo que habían visto.
Pero esto no paró ahí, en la noche, cuando todos dormían, una luz apareció en el arroyo, Chuyita despertó, y al abrir sus ojos miró una sombra que le decía que la siguiera y le apuntaba hacia el cauce del arroyo.
Al ver esto, la niña se puso de pie y caminó hacia el arroyo, uno de sus hermanos corrió tras de ella para tratar de detenerla, al llegar ahí y ver que una sombra se llevaba a su hermana, se llenó de miedo y se desmayó.
Al salir el sol, la mamá de la niña despertó y se percató que no estaban Chuyita y uno más de sus hijos, por lo que salió corriendo de la casa rumbo al arroyo, en donde encontró al niño todavía inconsciente.
Al reaccionar, el niño rompió en llanto lleno de miedo, por lo que había sido testigo. La mamá le preguntó por su hermana, y el pequeño, aún temblando, le contó que se la había llevado caminando sobre el arroyo un monstruo, el cual describió grande, con cabeza de sapo, dientes enormes y cuerpo de cocodrilo.
Al escuchar lo que su hijo le contó, la mamá dijo que quien se había llevado a su hija fue el "Chan" del agua, quien se dice que es el dueño de las almas pecadoras de niños que no han sido bautizados.
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CREENCIA
Pobladores de las comunidades del sur de Sinaloa, tienen la creencia que el "Chan" del agua es el dueño de las almas pecadoras de niños que no han sido bautizados.
PARA SABER
Esta historia ocurrió a principios de la década de los 90's. Chuyita, una niña de 9 años de edad, se perdió en medio del arroyo Juana Gómez al seguir al "Chan" del agua.
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