Culiacán, Sin.- El alcalde Jesús Estrada Ferreiro busca tener sus propios vendedores ambulantes en perjuicio de quienes ya tienen mucho tiempo ejerciendo está actividad y a éstos últimos se les está orillando a que renuncien con el incremento del 100 por ciento a los pagos por derecho de piso, denunció la Comisión de Defensa de los Derechos Humanos.

Oscar Loza Ochoa, secretario de vinculación de esta comisión, lamentó que en lugar de ordenar este tipo de comercio, las acciones del Ayuntamiento de Culiacán sean más para hacerlo más desordenado.

Expuso que de acuerdo a la denuncia de la asociación de Artesanos y Vendedores, en el primer cuadro de la ciudad hay proliferación de nuevos vendedores ambulantes, que obviamente cuentan con el aval de la autoridad municipal.

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Como ejemplo de ello citó la instalación de dos nuevos puestos de venta de churros, a pesar de que éstos habían sido calificados como peligrosos, por el manejo de fuego y de aceite hirviendo.

El problema es, dijo, que ya había un puesto de churros, el cual opera con una vitrina de cristal templado, que protege del aceite hirviendo, además de que cuenta con extinguidor y botiquín de primeros auxilitos, todo lo cual no tienen los dos nuevos puestos.

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