Culiacán, Sin.- Minutos después de las 2 de la madrugada del 1 de enero de 2017, hace ya cinco años, Claudia se encontraba celebrando el Año Nuevo en casa de su hermana en la sindicatura de Aguaruto.

Ella junto a sus dos hijas daban el abrazo para irse a casa a descansar, pues había sido un día ajetreado, sólo estaban esperando a Joelito, quien era el hijo del medio y había salido con Ariel, su amigo.

Claudia llamó a Joelito, para avisarle que ya estaban en casa y que no fuera con su tía, pero Joel no contestó, fue en eso cuando llega a casa y le pide permiso a su mamá para ir a casa de su tía pues quería seguir conviviendo y celebrando el año nuevo, luego de que Claudia le dio permiso, Joelito tomó su suéter y se sube a una moto, la cual era manejada por su amigo y se va.

LA VIDA EN UN SEGUNDO

En cuestión de segundos, se escuchan unos disparos, fue cuando la madre de Joel presintió que algo malo le había pasado a su hijo.

Claudia relató que esa noche el único error de Joelito, fue haber pasado por un callejón oscuro; en ese callejón se encontraba Jonathan discutiendo con su pareja sentimental, cuando de pronto empezó a efectuar disparos y uno de ellos atravesó la espalda de Joelito, quien mal herido expresó: “Güey, me cayó un cohete”, y abrazó a Ariel que iba manejando la motocicleta, sin embargo poco a poco se fue desvaneciendo.

“Joelito era muy vacilador y su amigo creía que estaba bromeando, cuando llegaron a casa de mi tía mi hijo se cayó de la moto, nadie entendía que había pasado, hasta que vieron a mi hijo herido”, expresó su mamá.

Al percatarse que Joelito se encontraba herido, su familia fue en contra de Jonathan quien fue el principal sospechoso, ya que desde la media noche había estado tirando disparos al aire y éste al principio se negó, sin embargo, dentro de las investigaciones se comprobó que el arma por la que perdió la vida Joelito era del Policía Federal.

“Él no conocía a mi hijo como para decir que le disparó directamente, aún estoy en shock porque sigo sin entender por qué disparó”, lamentó.

UN GUSTO POR LAS MOTOS

Joel Ontiveros Traslaviña nació un 1 de septiembre de 2001, era el hermano del medio y el único varón pues su madre tiene otras dos mujeres, en 2017 a la edad de 15 años, cursaba la secundaria y era un niño muy querido por sus amigos y familia, sus pasatiempos eran jugar futbol y arreglar motocicletas, además soñaba con tener su propio taller automotriz.

“A mí hijo le gustaban mucho las motocicletas, era un niño muy querido, él era la luz de la casa, si estaba triste, él me sacaba una sonrisa; a pesar de ser el único hombre era muy apegado a mí” recordó su madre.

PRÓFUGO

Después de 5 años del crimen, Jonathan Aguilar Jiménez se encuentra prófugo de la justicia relacionado con el delito de Homicidio Doloso, derivado de la causa penal 02/2017, dictada por la Procuraduría General de Justicia del Estado de Sinaloa.

Hasta la fecha, lo único que se sabe del presunto responsable es que, en el momento del homicidio era Policía Federal activo y su lugar de origen: Ciudad de México.

“Cuando nosotros estábamos sepultando a mi hijo, a él lo tenían en audiencia y lo soltaron por falta de pruebas; a él lo soltaron y lo citaron días después a otra audiencia pero él ya había escapado”, contó.

“Los mismos amigos lo ayudaron a escapar, si ya sabían lo que había hecho; el solo hecho de ser federal hizo que este caso a la fecha quedara impune”

PROCESO DE SANACIÓN

Para Claudia, el proceso de sanación ha sido muy difícil, el perder un hijo nunca se supera, incluso tuvo una severa depresión la cual casi la lleva al borde del suicidio, con el tiempo tuvo que asistir al psicólogo, terapeutas para que la ayudaran a sobrellevar este dolor.

Asimismo, se acercó a la iglesia, en donde ha logrado seguir adelante con sus dos hijas apoyándose en Dios.

“La verdad es un dolor que no se lo deseo a nadie y pues gracias a Dios que me ha ayudado, me he refugiado en él y es quién me ha ayudado a sobrellevar este dolor”, expresó.

La ausencia de Joelito, apagó la luz en su hogar, desde ese 1 de enero de 2017 una parte de su madre se fue con él, así como todas las personas que lo quisieron en vida. El niño que bailaba y cantaba en su casa partió de este mundo para ser un angelito muy recordado por sus familiares.

Gracias a Dios que me ha ayudado, me he refugiado en él y es quién me ha ayudado a sobrellevar este dolor.

Claudia Traslaviña, Madre de Joel

5 Son los años que se cumplieron del crimen de Joel el pasado 1 de enero.

15 Son los años que tenía la víctima al momento del deceso aquel año nuevo trágico.

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