Un reporte de amenaza de bomba llegó a las líneas de emergencia del 911, avisaba que en una plaza comercial y de esparcimiento nocturno en Culiacán había un explosivo, por lo que las corporaciones de seguridad municipal y estatal así como de Protección Civil y el escuadrón especializado en desactivación de explosivos de la Novena Zona Milita r se movilizaron alrededor de las 21:00 horas el pasado miércoles 18 de enero en la plaza Ventura.
Esto sucedió 13 días después del "jueves negro", cuando la paranoia de la violencia todavía no se iba del todo en la población.
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Rápidamente medios de comunicación se trasladaron al lugar y reportaron a la sociedad lo que estaba sucediendo, posteriormente la Secretaría de Seguridad Pública emitió un comunicado confirmando el reporte por explosivo y explicando que las autoridades ya se encontraban realizando la inspección correspondiente.
Ante el daño inminente que podría provocar una explosión en tan concurrido lugar el pánico social no se hizo esperar, las autoridades desalojaron alrededor de 2 mil personas que se encontraban en los restaurantes y centros de esparcimiento, cerraron las vialidades contiguas y desviaron el tráfico.
Sobre las 23:00 horas las autoridades informaron que el operativo de inspección continuaba y pidieron a la población guardar la calma y esperar mayor información.
A la mañana siguiente hubo un silencio total, no hubo un posicionamiento oficial, un comunicado, un anuncio o un mensaje de alguna autoridad municipal o estatal que diera cuentas de los hechos ocurridos la noche anterior.
Al preguntar directamente a la dirección de comunicación social de la Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito Municipal por el resultado del operativo, la respuesta que se tuvo fue que la Secretaría no emitió información oficial, ni ninguna otra autoridad.
Un medio de comunicación que se encontraba en el lugar confirmó que había sido una falsa alarma.
Ausencia de información
Por los hechos violentos del jueves 5 de enero y el temor a posibles réplicas de ataques o enfrentamientos la sociedad debe estar bien informada, y es la autoridad quien debe cumplir y respetar este derecho humano, declaró el activista y defensor de los derechos humanos en Sinaloa, Óscar Loza Ochoa.
"Es un derecho humano a tener información y ellos son empleados públicos, son nuestros empleados, ellos deben de tener la obligación de informarnos lo que sucede", expresó el activista.
“Este marco en el que estamos viviendo se presta mucho para desinformar, informar a la sociedad debe ser algo que deben de realizar de manera puntual, porque lo dejan a uno en el limbo y no sabe uno ni que pensar, ni que hacer y eso inhibe la salida de su casa, inhibe enviar a los hijos a la escuela, mil cosas”.
Las autoridades y especialmente el Gobernador Rubén Rocha Moya deben salir e informar a la sociedad ante hechos violentos, operativos de seguridad y posibles ataques, enfrentamientos o situaciones que ponen en riesgo la vida e integridad de las personas.
“Si hay una situación de emergencia que dé la cara (el Gobernador Rubén Rocha Moya), eso es lo que necesitamos”, declaró Óscar Loza Ochoa.
Son precisamente estos vacíos en la información los que dan pie a la desinformación y las fake news, opinó el Coordinador General del Consejo Estatal de Seguridad Pública, Miguel Calderón Quevedo, por lo que exhortó a las autoridades a contar con mecanismos eficientes de comunicación.
“La autoridad al generar vacíos de comunicación se llenan por las fake news. La autoridad debe eficientar sus mecanismos de comunicación para no dejar vacíos a la especulación”, declaró Calderón Quevedo.
