Culiacán, Sin.- Hace 26 años, por un desperfecto en el equipo de sonido que utilizaban para anunciar a los niños al bat en la Liga de Beisbol Infantil y Juvenil Tres Ríos, surgió un personaje que ahora es todo un referente en este noble movimiento.
Nada tenía que ver él en ello, estaba ahí en las gradas a invitación de Gilberto “Bolochi” Bustamante para ver jugar al hijo de éste (“El Pinole”) en un torneo nacional Infantil Mayor y aprovechó la ´recta´ llevando a sus hijos para ver sí de casualidad les gustaría el beisbol.
Pero el destino le tenía deparado algo diferente, cierto es que tuvo el tiempo suficiente para inmiscuir a sus hijos al movimiento, hasta el asumir responsabilidades como manager-entrenador, pero al ver que varios padres de familia le dejaban prácticamente toda la carga de pagos diversos que origina estar al frente de un equipo de beisbol, sabiamente pensó que lo más redituable era declinar de esa misión.
Pero bueno, habrá que apuntarlo, nos referimos a José Ángel Bustamante Palazuelos, mejor conocido como “El Caifán de las Ligas Pequeñas”.
¿Y qué pasó entonces?
“Fui e inauguraron el juego, en ese tiempo estaba el profe Singh (presidente), vi que estaban acomodando un sonido y me di cuenta que no sabían, entonces me dice el “Bolochi”, oyes, tú sabes de eso, porque no ayudas a conectar el sonido. Con gusto lo hice, porque no daban con bola, les comuniqué que ya estaba listo, me dieron las gracias, pero luego me dijeron, oiga y no se anima a ayudarnos a mencionar a los muchachos y dije entre mí, pues yo vengo a ver el juego, pero les voy a hacer el paro, les dije, con el juego este”.
A decir de Bustamante Palazuelos, él es de los fundadores en Difocur, que en su oportunidad lo capacitaron para saber cómo colocar luces, sonido, ser maestro de ceremonia, así como programación, promoción y evaluación y estadística de las actividades culturales.
A partir de entonces nació la Leyenda, “hace 26 años lo hice y la verdad, a mi me gustó, porque miraba en los muchachos que sentían algo especial cuando los mencionaba, ya que no es lo mismo jugar así de seco a que estarlos mencionando a través del sonido y que todos los asistentes se enteren quién batea”.
Luego sostiene que veía que era una especie de estímulo para ellos, levantarles el ánimo y se sientan ellos otra cosa “y de ahí ya me dijo el profe Singh, oiga porque no se viene aquí, te damos una propina, aunque no supiera anotar, pues iba a estar una persona cumpliendo esa labor”.
Añade que asumió la responsabilidad porque en el trabajo que tenía, en esa ocasión estaba de vacaciones, “me gustó el rollo, me clavé, y después aprendí a anotar”.
Desde luego que ya metido en eso, su meta era equiparse, contar con las herramientas que utilizaría y que, por tanto, se presentó que le saldaron una deuda pendiente e invirtió el dinero en un equipo de sonido que empezó a utilizarlo en la Liga Tres Ríos.
“Empecé a anunciar y a ponerle sobrenombres a los ´plebes´ y el día que los anunciaba sin decir el sobrenombre, iban y me reclamaban y pues más me di cuenta que a los ´plebes´ les gustaba la mala vida”.
En ese entonces, él todavía no asumía el sobrenombre de El Caifán, pero existe un conocido refrán de que “con la vara que mides serás medido” y los niños lo bautizaron como tal.
“Los ´plebes´ ya vez como son, a como uno los bautiza, ellos te la regresan. Pero ese apodo fue por lo del Caifán de los Tomateros (Jorge Niebla), empezó a agarrar popularidad él y hasta creían que yo era y les respondía que yo no era, y que para él mis respetos. Que él era el número uno, que no fuera él a pensar que lo quiero opacar. Me empezaron a decir Caifán y Caifán se me quedó y ni modo que les diga que no”.
José Ángel asienta que él siempre ha sido respetuoso con los niños, así como con los padres de ellos, que a él le gusta llevarse con los ´plebes´, dialogar, bromear y que dentro de ello han surgido los sobrenombres dependiendo de cómo se ven o actúan los pequeños.
“Les decía, fíjate que a ti te voy a decir así y me contestaban, oiga se oye bien, y la respuesta de ellos es, dígame así cuando me anuncie y más que yo tenía la amistad con los papás y sabía que no se iban a molestar porque no eran sobrenombres ofensivos, que lastimaran, nada de bullying, puro cotorreo y ellos felices”.
La grandeza del Caifán de las Ligas Pequeñas es mayúscula, pues refiere que esto de la anunciada lo agarró como un hobby obligatorio, que le dice a la gente que hasta de su bolsa pone dinero para arreglar los aparatos y para grabar la música.
“Eso no es fácil y si se me descompone un aparato yo tengo que arreglarlo, yo no cobro ningún cinco ahí en la liga. Cobro cuando hay que estar todo el día en los Distritales y Nacionales porque es trabajo de todo el día y no podemos estar regalándolo”.
Pero que, con uno a dos jueguitos no hay problema, porque sabe que a los niños los motiva mucho.
“Ahí uno conoce a niños desde los pañalitos hasta la categoría más grande, los ves crecer y eso también es extraordinario para uno”.
¿Serán más los amigos que has hecho que el dinero que has recibido?
--“Sí, así es, porque si me pongo yo a hacer una evaluación de eso, me han quedado a deber como no te imaginas de los torneos, oyes que me faltó dinero, que luego te pago y eso nunca llega”.
¿Qué sientes el tener esa relación, ese acercamiento con los niños y sobre todo, que exista la química de ambas partes?
--“No sé, creo que será a raíz de la forma en que llego con ellos, llego a la liga saludando a los ´plebes´, me echan gritos porque quieren que les diga por su sobrenombre. Hay ´plebes´ que se llevan conmigo por más amistad, comparten pláticas y les empiezo a dar carrilla, pero en buena lid”.
Otra de las virtudes del Caifán es que él es propiedad de su ´carta´, es decir, en cualquier circuito de ligas infantiles se aparece con su peculiar voz para impulsar a los niños.
Bien anuncia un juego normal de liga, que en Distritales, Nacionales y eventos de corte Internacional.
En este último podemos mencionar las Mini Series Mundiales que organizaba la Liga Culiacán Recursos cuando su presidente era “Polito” Avilés Nario.
“Tengo amistad con los presidentes, luego me hablaron para echarle la mano en los Distritales, ya sabía anotar y me decían que pusiera el sonido y ahí me relacioné con los otros”.
Otra de las facetas del Caifán de las Ligas Pequeñas es que no es de los que gustan figurar en puestos directivos, pero sí apoyar con opiniones de peso en base a los conocimientos que adquiere desde el ángulo donde siempre ha estado y gracias a ello ha enriquecido tanto a cada uno de los circuitos locales, como a la Región III en sí.
Tampoco es de los que buscan reconocimientos, pero es ineludible cuando de una u otra formas aportas a un movimiento tan sensible como el de los niños.
En ese tenor, en la liga Tres Ríos ha sido homenajeado en par de ocasiones y el Interligas que inicia este 4 de diciembre, pero que su inauguración será en enero de 2022, lleva su nombre.
FRASE
JOSÉ ÁNGEL BUSTAMANTE PALAZUELOS
“Empecé a anunciar y a ponerle sobrenombres a los ´plebes´ y el día que los anunciaba sin decir el sobrenombre, iban y me reclamaban y pues más me di cuenta que a los ´plebes´ les gustaba la mala vida”.
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