Culiacán, Sin.- Después de que los congresos locales de Oaxaca y Tabasco aprobaran la prohibición de golosinas y refrescos a menores de edad, dicha iniciativa ha hecho eco en diversas entidades del país.
La controvertida medida ha provocado una serie de críticas por parte de organismos como la Coparmex, la Asociación Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC), la Asociación Nacional de Productores de Refrescos y Aguas Carbonatadas (ANPRAC) y la Cámara de Comercio Hispana en los Estados Unidos quienes consideran que la iniciativa no soluciona los problemas de obesidad infantil que enfrenta el país.
Incluso el propio Presidente, Andrés Manuel López Obrador, ha enviado un mensaje claro a las legislaturas locales señalando que: “No se deben de prohibir las cosas. Prohibido prohibir. Lo más importante es crear conciencia. Orientar para que haya una buena alimentación y buena información a la población. Es necesario buscar el equilibrio entre las empresas y la salud de la población”.
De igual manera, la Cámara de Comercio Hispana en los Estados Unidos (UDHC por sus siglas en inglés) también ha mostrado su preocupación frente a la iniciativa y que consideran que afecta a la inversión y al espíritu del T-MEC. El organismo indico que “Gobiernos estatales no pueden detener sectores empresariales prósperos, mientras que paralizan un estímulo económico crucial para México donde la comunidad empresarial ya ha sido fuertemente afectada por el Covid-19”.
Por su parte, Cuauhtémoc Rivera, presidente de la Asociación Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC), asegura que las políticas prohibicionistas no abonan a la pretendida solución que dicha medida quiere aportar, por el contrario, este tipo de iniciativas afectan directamente a pequeños comerciantes.
A su vez, la Coparmex ha hecho hincapié en que la reforma aprobada también “es discrecional y discriminatoria”, pues focaliza el problema del sobrepeso y la obesidad en el consumo de determinados productos y “no considera la multifactorialidad de la problemática".
En el mismo sentido, la Asociación Nacional de Productores de Refrescos y Aguas Carbonatadas (ANPRAC), ha señalado que las bebidas saborizadas no son el principal contribuyente de calorías en la dieta de los mexicanos. Solo el 37 % de la población consume refrescos regulares.
Haciendo eco de lo sucedido en Oaxaca y Tabasco, en Sinaloa la medida está siendo impulsada por el diputado de Morena, Pedro Lobo y respaldada por la diputada Graciela Domínguez Nava, presidenta de la Junta de Coordinación Política en el Congreso del Estado y coordinadora del Grupo Parlamentario del mismo partido.
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MÁS PROPUESTAS
Existen otras cuatro iniciativas similares, dos más de Morena, una más de la Comisión de Educación Pública y Cultura, y otra del Partido Sinaloense que son estudiadas en comisiones.
LA MODA
En Baja California Sur se promueve una iniciativa que busca prohibir la venta de alimentos con alto contenido calórico cerca de escuelas.
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