Culiacán, Sin.- Un pequeño tubo con contenido chicloso y un popote, eran suficientes para hacer sonreír a un niño. Aunque este producto fue tachado de peligroso por su contenido tóxico, se sigue vendiendo y muchos de sus consumidores, no son precisamente niños.
Me recuerda a cuando era todo más sencillo, yo era niña y mis papás me lo compraban cuando salíamos a pasear Liz
Solo quince pesos cuestan este y otros artefactos que a Liz le traen recuerdos y, aunque barato y a la vista de todos, es el quinto artículo que ha logrado vender Don Óscar, vendedor ambulante del primer cuadro de Culiacán.
Al saber esto, Liz también compró una diminuta lotería, a 10 pesos. “No la necesito, pero es muy curiosa, de bolsillo, por si te aburres en la oficina” asegura.
Ya van seis cosas que vende Don Óscar, y muy probablemente, no haya más.
"Es injusto que sólo a nosotros, los vendedores ambulantes, nos dejen trabajar tres días a la semana. Mire, yo entiendo que es por la pandemia pero, por qué a las grandes empresas sí las dejan abrir a diario" agrego Don Óscar
Toda su vida, ha sido comerciante ambulante. Sus productos son curiosidades como cucarachas de plástico y otros artículos para hacer bromas, loterías miniaturas y de tamaño normal, burbujas chiclosas y cosas de utilidad también; además vende pomadas y jabones de componentes naturales.
Ahora nos dijeron en el ayuntamiento que no podemos tener dos giros, o sea que, o vendo pomadas o vendo juguetes, esos que dijo la muchacha que le recuerdan a cuando era plebita Don Óscar
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Óscar asegura que siempre ha pagado y cumplido con lo establecido por el ayuntamiento, pero percibe injusto que sólo a los comerciantes con poca infraestructura a comparación de los establecimientos, los condicionen para poder trabajar.
Pero un agradece, aunque venda cinco cositas, yo entiendo… pero es difícil mantenerse así… ni modo, a seguir vendiendo, y si no, de perdida a traerle recuerdos a los jóvenes, pa´que sonrían Don Óscar
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