Culiacán, Sin.- En Villa Bonita, al sur de la ciudad, más de 20 casitas de distintos materiales reciclados, invaden el espacio público. Sus moradores viven entre la precariedad social y la amenaza de una pandemia que adentrará a Culiacán a la “nueva normalidad” sin paracaídas.
Gerardo Flores relata que, pese a que viven pegado a un arroyo denunciado como peligroso en tiempo de lluvias por los vecinos del fraccionamiento aledaño, durante los cuatro años que llevan ahí, nunca se han inundado. Hace meses tuvieron un incendio de origen desconocido que afectó a cuatro casas, pero éste ni ningún otro percance es superior a la incertidumbre de no tener dinero para rentar una vivienda digna... mucho menos comprarla.
Hace como mes y medio se incendiaron unas casitas acá, no sabemos si fue intencional o por los diablitos. De ahí en fuera todo es muy tranquilo, el agua no nos llega cuando llueve.
Gerardo Flores
Gerardo trabaja surtiendo de refresco una tienda de la colonia Antonio Toledo y comenta que eso, y lo poquito que le dan al hijo en la llantera en la que trabaja, es con lo que han sobrevivido en la cuarentena.
Mi esposa trabajaba limpiando casas pero su patrona la descansó por esto de la pandemia, ahí ya se fue otro dinerito. Y pues nosotros estamos viviendo aquí porque no nos alcanza para rentar, por eso estamos aquí todos. No podemos comprar ni rentar con trabajo sin pandemia, ahora con ella
Gerardo Flores
Por el pasillo de tierra que atraviesa estas viviendas de madera, lamina, cartón y demás materiales reciclados; se observa los llamados “diablitos”, esos cables que de manera clandestina toman luz de los postes. Los niños, ancianos y mujeres que ahí viven, son víctimas de la falta de oportunidades y educación para un empleo con prestaciones de ley. La mayoría de los “vecinos invasores” laboran en la albañilería.
Hasta ahora, ninguno de ellos ha dado positivo a Covid-19. Gerardo que es un señor de 40 años y que sufre de hipertensión, no dejó de trabajar de manera total pese a su alta vulnerabilidad a que el virus lo ataque, pues sabe que aún sin pagar uso de suelo, agua o luz; el dinero no va alcanzar para las necesidades básicas.
Una de las representantes de nosotros ya ha ido hablar con el ayuntamiento y pues nomás quedamos en veremos. Nosotros sí quisiéramos un lugar bien.
Gerardo Flores
Si bien, el municipio bajo la administración de Jesús Estrada Ferreiro, les ha hecho llegar algunas despensas pero sobre el apoyo para una vivienda digna, aún nada.
La semana pasada en IMNUVI, lanzó un comunicado para que la población con poca oportunidad económica de tener su domicilio, se asesore vía WhatsApp o por la página de internet.
En el Instituto de Vivienda del Municipio de Culiacán, tenemos como prioridad trabajar fuertemente todos los días, con sensibilidad y cercanía para atender directamente las peticiones y necesidades de las familias más vulnerables de Culiacán, nuestra finalidad es contribuir en la realización de un derecho humano básico como lo es la vivienda.
Gerardo Flores
Sin embargo, esta sensibilidad no ha llegado a la calle mina real de catorce en la colonia Villa Bonita.
DESPROTEGIDOS
Las familias asentadas en esta zona dicen sentirse vulnerables ante la pandemia y los elementos naturales.
UNA DESPENSA
Hasta la fecha, solamente se les ha hecho llegar una despensa de víveres.
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