Culiacán, Sin. - "Se había pasado de lanza, lo maté por robarse unas libras", confesó Iván Alejandro mientras se esnifeaba una raya de cocaína frente a un amigo, quien ahora es uno de los 40 testigos que rindieron declaración ante la Fiscalía General del Estado.
El viernes fue el desahogo de pruebas en la audiencia inicial del caso Humberto Trejo Espinal. Allí en el Centro de Justicia Penal de Culiacán Iván Alejandro estuvo presente con una mirada seria, a veces impaciente, con su cabello rizado y complexión robusta en comparación a un borrego. De hecho, por eso sus amigos lo bautizaron como “El Borre”.
Todas las pruebas apuntan a que legalmente él debe ser señalado como culpable de la muerte de Humberto Trejo Espinal. “El Borre” fue vinculado a proceso con prisión preventiva oficiosa y dentro de tres meses se presentará la investigación complementaria.
El hallazgo del cuerpo de Humberto fue el 26 de enero del 2019, en un predio ubicado a dos kilómetros de la entrada principal de La Primavera, ese espacio de terracería se usa como cajones de estacionamiento de la residencia privada. Luego de que los familiares, amigos y una novia de Humberto no supieran más de él desde la noche anterior, fueron unos niños de la privada quienes le informaron a un guardia que había un cuerpo de un hombre en el espacio ya mencionado.
Antes de morir por los nueve disparos que le lanzó Iván de calibre nueve milímetros, Humberto intentó llamar a su madre pero ella no le alcanzó a contestar. Sin embargo, como si Humberto o, Beto, como le dicen sus amigos, hubiese presentido que ese día iba a morir, le avisó a un amigo cercano que su vida corría peligro.
"Si me matan ya sabes quién fue", le escribió Beto a un amigo por Whatsapp, anexando una foto de un borrego, indicando que se trataba del alias de Iván.
Las Pruebas
En el desahogo de pruebas, en voz del Ministerio Público, salió a relucir que, cuando se notificó la muerte de Humberto por redes sociales, sus allegados comenzaron a comentar que "El Borre" lo había matado. Estos comentarios fueron emitidos porque él mismo reconoció que había privado de la libertad a quien llamaba amigo.
Los testigos, en entrevistas con el Ministerio Público describieron a Iván como un fanfarrón, violento y drogadicto. Esto porque Iván siempre presumió su consumo de drogas y uso de armas. "El Borre", estuvo anexado en más de una ocasión pero, a inicios de 2019 salió del último centro de rehabilitación que visitó dado que presentaba una conducta muy violenta.
Los registros telefónicos dados al Ministerio Público, el registro gráfico de las cámaras de vigilancia de la ciudad y el resultado del peritaje y autopsia, apuntan a que, sí, como "El Borre" lo dijo, él mató a Beto.
La defensa del joven al parecer no está preparada para dar una buena defensión, sin embargo, la familia Trejo Espinal, luego de un año de búsqueda de quien matara a su hijo, esperan que se haga justicia.
Pese a que el todavía presunto asesino de Beto, no deseó hacer uso de su voz, sí dijo algo a su defensor; Iván Alejandro le dijo sí a su abogado, para que de una vez, lo vincularan a proceso, y se acortara el procedimiento.
El abogado de “El Borre” pidió al ministerio público que leyera con detalle el desahogo de pruebas contra su cliente, el mismo abogado que, luego de 18 horas de haber pedido un receso para leer la enorme carpeta de investigación, pidió otro receso este viernes al iniciar la audiencia, pues expresó que no le habían entregado material gráfico de evidencia.
Sin embargo el juez no se le concedió la petición.
“El Borre" no se percibió violento, hasta pidió permiso para ir al baño a media audiencia, sin embargo, su gesto parecía el de alguien duro, con una mirada pesada, con la que de reojo observaba de vez en cuando a la familia Trejo Espinal.
Finalmente, esta audiencia arrojó que se darán tres meses para defender a Iván, meses en los que estará en prisión preventiva.
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Investigación
Se presentaron datos de prueba derivados de más de 100 actos de investigación desarrollados en menos de dos meses, según la Fiscalía General.
Último Mensaje
En uno de sus últimos mensajes la joven víctima le escribió a un amigo de confianza que si algo le pasaba ya sabía quién iba a ser, en este caso apuntando a Iván Alejandro.
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