Culiacán, Sin. “Quédate en casa… me taladra los oídos, ya no quiero escucharla, se va a quedar en mi mente toda la vida, porque el confinamiento es el peor enemigo para los trabajadores del volante”, advierte Juvenal Mendoza quien detuvo su taxi debido a que no hay pasaje.
No me salía, tenía que pagar renta del taxi, gasolina y si era necesario darle gel a los usuarios y la verdad no me salía, además muchos usuarios son muy inconscientes, les pedía que ocuparan el asiento de atrás y se hacían que no escuchaban, además muchos sin tapabocas.Juvenal Mendoza
La medida de no salir de casa y el temor de la población ante el contagio por coronavirus no solo han afectado al sector comercial, choferes de taxis y aplicaciones señalan una considerable disminución en los viajes que realizan, además, refieren que las medidas sanitarias que aplican corren de su bolsillo, como regalar gel antibacterial a los pasajeros.
Los taxistas dicen que tienen miedo a ser contagiados, debido a que muchos usuarios no quieren tomar las medidas necesarias, además de que muchos servicios son para hospitales.
No podemos negarle el servicio a un enfermo, nada más me encomiendo a Dios, porque no se si el pasajero es portados del coronavirus. Trato de hablar lo menos posible, para no entablar conversaciones con los usuarias
Juan Ibarra.
En la capital del estado ha mermado en 70 por ciento los servicios.
En promedio, trabajando entre 12 a 14 horas, normalmente hacían de cinco a nueve servicios al día, ahora aproximadamente son solo tres o cuatro. Nomás escucho quédate en casa y hasta la cabeza me duele, porque me recuerda que va a ser otro día malo, la gente cada vez sale menos y si lo hace, es con miedo. Muchos me preguntan si no estoy enfermo, me piden gel o alcohol para limpiar el carro.
Juvenal Mendoza.
Javier Rodríguez asegura que el panorama está muy crítico.
Nosotros como trabajadores del volante pagamos renta, muchos llegamos a las cuatro de la mañana y nos vamos a las once de la noche para dar tres o cuatro servicios al día.
Javier Rodríguez
Muchas veces estamos trabajando nada más para el patrón, porque hay veces que solamente damos una vuelta al día y hasta los patrones ya quieren parar el carro porque no hay pasaje.
Javier Rodríguez
El taxista que presta sus servicios en la central camionera indica que de 90 carros que hay en ese lugar ahorita cuando mucho hay 60 y el resto también están en cuarentena.
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Cuando bien les va dan dos o tres servicios “a veces nada más damos una vuelta al día. El patrón ya quiere parar el carro, porque no hay pasaje y no tenemos ni del gobierno, ni de nadie apoyo , nada más lo que Dios nos manda”, lamenta.
Algunos patrones si son conscientes y bajaron la renta, normalmente pagamos 2 mil cien pesos a la semana, ahora pagamos la mitad y de todos modos, no alcanzamos, está duro para ellos y para nosotros, como choferes porque se pagan impuestos del estacionamiento, gasolina, más el agua o refresco.
Javier Rodríguez
Antes del Covid-19 dice que tenían de ocho a diez vueltas durante su jornada de trabajo que es de ocho horas y los lunes que eran días buenos de once a trece vueltas, ahora, a veces, tienen dos servicios en toda la jornada.
Por ejemplo este día tuve una sola salida de cien pesos, de ahí voy a pagar el 13 por ciento del boleto, me quedan 87 pesos, la mitad para el patrón y la mitad para mí me cobran el boleto.
.Javier Rodríguez
Los taxistas señalan que no quieren dejar de prestar los servicios porque de ahí sale para sostener a la familia y es un servicio que necesita la gente de menos recursos, nada más, dicen, “pedimos la sana distancia y se protejan lo más que puedan por su bien y el bien de nosotros”.
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