Una de las principales angustias de todo padre y madre es que sus niños no quieres comer alimentos saludables, siempre prefieren otra cosa antes que comer una buena comida llena de nutrientes.
La especialista en nutrición, Pamela Rodríguez, explicó para El Sol de Sinaloa, que el cerebro, en especial de los niños, está orientado a preferir alimentos altos en calorías, siendo esta la razón por la que los alimentos altos en azúcar, grasas y sal atraen más que los que contienen fibra.
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A esto se le agrega, que hoy en la actualidad los adultos llevamos una vida mucho más acelerada, en la que tanto como papá y mamá trabajan, llevan el día a día con diferentes actividades, lo que resulta más fácil pedir o comprar algo en la calle que cocinar en casa, y el resultado de esto es que hace mucho más difícil inculcar buenos hábitos alimenticios a nuestros niños.
“Considero que es súper importante que, desde los primeros años de vida de nuestros pequeños, les inculquemos buenos hábitos alimenticios, para crearles grandes defensas, así como evitarles el riesgo de sufrir obesidad tanto en su niñez con en su vida adulta”. Explicó la experta en nutrición.
Aun así, destacó que nunca es tarde para iniciar a enseñarles a los niños a alimentarse sanamente y para lograrlo Pamela Rodríguez, comparte con este semanario estas recomendaciones:
NO PIERDAS LA PACIENCIA
Sé paciente, los niños tienen que recibir mínimo 5 exposiciones de un sabor nuevo antes de aceptarlo, ofrécele opciones saludables, pero ojo, sin obligarlo a comer, si se presiona a los niños a comer un alimento determinado, es más probable que se nieguen a comer ese alimento, incluso si se trata de algo que suelen disfrutar, ofrezca una variedad de alimentos nutritivos, ellos pueden decidir qué y cuánto comerá de las opciones que le ofrezcas.
ALIMENTOS VISTOSOS
Trata de elaborar alimentos que llamen su atención, que sean comidas de una forma creativa y vistosos, busca también que sean alimentos accesibles, fáciles de comer, que puedan comerse con las manos. También puedes mostrarle la importancia de cada nutriente, motivándolos a que con esos alimentos les ayudan a ser niños mucho más fuertes, niños más raídos e inteligentes.
COMIDAS EN FAMILIA
Comer en familia es una costumbre agradable tanto para los padres como para los hijos. A los niños les agrada la previsibilidad de las comidas en familia, y algo muy importante, los niños que participan en comidas en familia es más probable que coman frutas, vegetales y cereales y menos probable que coman refrigerios poco saludables. Has que la hora de la comida sea un momento agradable y donde uno se sienta a gusto, sin discusiones o sermones.
PON EL EJEMPLO
La mejor manera de estimular al niño a comer de manera saludable es dando el ejemplo. Los niños imitan a los adultos que ven a diario, si ven que sus papás disfrutan comer una ensalada, verduras o frutas o haciendo ejercicio, es más fácil que quieran probarlo también ellos.
TEN A LA MANO ALIMENTOS SALUDABLES
Los niños, en especial los más pequeños, comen sobre todo lo que está disponible en la casa. Por eso, es relevante tener en casa y a la mano alimentos nutritivos, evita tener a la vista comida chatarra.
HAGAN EQUIPO
Una muy buena manera de motivar a los niños a probar nuevos sabores es invitándolos a seleccionar en el súper, lean juntos las etiquetas de cada producto para conocer su información nutricional, también permitirles que nos acompañen a cocinar en casa los motiva mucho a probar nuevos alimentos.
SENTIMIENTOS
La tristeza o la ansiedad de un niño, o una crisis familiar, pueden hacer que coma de menos o en exceso. Si piensa que las emociones de su hijo están afectando su alimentación, concéntrese en resolver el problema que causa las emociones, en lugar de concentrarse en la conducta alimentaria.
¿Cuáles son los riesgos de una mala alimentación?
Un niño con malos hábitos alimentarios no estará bien nutrido, es decir, no está recibiendo las cantidades de nutrientes necesarias para un crecimiento y un desarrollo saludables. Esto puede llevarlo a tener un peso bajo o sobrepeso. Los niños mal alimentados tienden a tener un sistema inmunitario más débil, lo que aumenta sus posibilidades de enfermedades.
Los malos hábitos alimentarios de un niño pueden aumentar el riesgo de enfermedades del corazón, presión arterial alta, diabetes tipo 2 o colesterol alto más adelante en la vida.
Refrigerios saludables
Si quieres que los buenos hábitos sean adoptados por todos en casa, tenles a la mano estos snacks
Barras de queso.
Galletas de trigo integral y mantequilla de cacahuate.
Palomitas de maíz reventadas por aire caliente o bajas en grasa para microondas.
Barras de jugo congelado hechas con fruta 100% natural.
Frutas frescas y secas.
Zanahorias pequeñas con "hummus" o dip de frijoles (habichuelas).
Yogur bajo en grasa con frutas frescas.
“Es muy importante inculcarles a los niños hábitos alimenticios desde sus primeros años de vida”
Pamela Rodríguez
Nutrióloga
Limita las comidas en restaurantes rápidos y los refrigerios poco nutritivos, como las papas fritas y los dulces.
Alimentación saludable
Esto significa comer una variedad de alimentos para que su hijo reciba los nutrientes (como proteínas, carbohidratos, grasas, vitaminas y minerales) que necesita para un crecimiento normal.
