/ lunes 11 de abril de 2022

Salud, Covid y expectativas económicas

El pasado viernes 01 de abril, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público remitió al H. Congreso de la Unión el documento conocido como Pre-criterios Generales de Política Económica 2023, que representa un adelanto de las proyecciones de crecimiento de la economía, el presupuesto público, los ingresos, el entorno financiero internacional, el manejo de variables estratégicas y una anticipación de los enfásis programáticos del gobierno en el próximo año.

Técnicamente, este procedimiento legislativo anual se realiza en cumplimiento a las disposiciones contenidas en el artículo 42, fracción I, de la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria (LFPRH), y tendrá continuidad una vez que en septiembre se presenten los Criterios Generales definitivos, junto a la iniciativa de Ley de Ingresos y el proyecto de presupuesto de egresos, que juntos integran lo que en el mundo parlamentario mexicano se denomina el “paquete económico”.

Desde luego, que en esta proyección inicial del marco macroeconómico y los objetivos de finanzas públicas para el 2023, el tema de salud pública y los efectos de la pandemia del covid-19 seguirán impactando, pero a ello se viene a sumar en esta ocasión las modificaciones que ha impuesto el conflicto bélico en euroasia, derivado de la invasión de Rusia a Ucrania.

Grosso modo, en el documento general presentado por la Secretaría de Hacienda, destacan las siguientes consideraciones.

Para 2022 se actualiza la estimación de crecimiento económico del PIB a un 3.4%, lo cual se da “en un contexto donde la economía global enfrenta importantes retos, entre los cuales destaca la prolongación de desbalances entre oferta y demanda derivados de la pandemia del Covid-19, los cuales provocaron cuellos de botella y problemas logísticos en las cadenas globales de valor, escasez de insumos industriales, aumentos en los costos de transporte y un alza en los precios de alimentos y materias primas, principalmente los energéticos”.

Asimismo, se considera que el conflicto geopolítico entre Rusia y Ucrania ha exacerbado las presiones al alza en los precios de alimentos y materias primas, al tiempo que podría generar desabastos de insumos industriales clave para la industria manufacturera y, en particular, para la producción automotriz mundial. Además, este asunto “representa una fuente de volatilidad en el mercado financiero, observándose recomposiciones de portafolios hacia instrumentos financieros de bajo riesgo, denominados en moneda de reserva y emitidos por economías avanzadas.”

En general, con estos Precriterios el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, está reafirmando el compromiso de mantener los equilibrios fiscales y macroeconómicos, garantizando el bienestar de las y los mexicanos. Y reconoce como motores de crecimiento y bienestar a la inversión en infraestructura, el mercado interno y el comercio exterior, estos últimos impulsados por la interconectividad que propicice la inversión.

En ese sentido, la política fiscal que la 4T se está planteando para la segunda mitad de la presenta administración se basa en: 1) Finanzas públicas sanas, 2) una trayectoria decreciente de la deudad pública, y 3) incrementar la recaudación a través del combate a la evasión y elusión fiscal.

Finalmente, es de destacarse que frente a la incertidumbre ocasionada por la aparición de la guerra y una inflación persistente importada del exterior debido al shock de oferta que está padeciendo el mercado global, el gobierno federal ratifica la consolidación del apoyo a las políticas públicas de salud y sobre todo al programa de vacunación y la estrategia en general para superar integralmente los estragos de la pandemia del Covid-19.

*Secretario de Salud del Estado de Sinaloa.

El pasado viernes 01 de abril, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público remitió al H. Congreso de la Unión el documento conocido como Pre-criterios Generales de Política Económica 2023, que representa un adelanto de las proyecciones de crecimiento de la economía, el presupuesto público, los ingresos, el entorno financiero internacional, el manejo de variables estratégicas y una anticipación de los enfásis programáticos del gobierno en el próximo año.

Técnicamente, este procedimiento legislativo anual se realiza en cumplimiento a las disposiciones contenidas en el artículo 42, fracción I, de la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria (LFPRH), y tendrá continuidad una vez que en septiembre se presenten los Criterios Generales definitivos, junto a la iniciativa de Ley de Ingresos y el proyecto de presupuesto de egresos, que juntos integran lo que en el mundo parlamentario mexicano se denomina el “paquete económico”.

Desde luego, que en esta proyección inicial del marco macroeconómico y los objetivos de finanzas públicas para el 2023, el tema de salud pública y los efectos de la pandemia del covid-19 seguirán impactando, pero a ello se viene a sumar en esta ocasión las modificaciones que ha impuesto el conflicto bélico en euroasia, derivado de la invasión de Rusia a Ucrania.

Grosso modo, en el documento general presentado por la Secretaría de Hacienda, destacan las siguientes consideraciones.

Para 2022 se actualiza la estimación de crecimiento económico del PIB a un 3.4%, lo cual se da “en un contexto donde la economía global enfrenta importantes retos, entre los cuales destaca la prolongación de desbalances entre oferta y demanda derivados de la pandemia del Covid-19, los cuales provocaron cuellos de botella y problemas logísticos en las cadenas globales de valor, escasez de insumos industriales, aumentos en los costos de transporte y un alza en los precios de alimentos y materias primas, principalmente los energéticos”.

Asimismo, se considera que el conflicto geopolítico entre Rusia y Ucrania ha exacerbado las presiones al alza en los precios de alimentos y materias primas, al tiempo que podría generar desabastos de insumos industriales clave para la industria manufacturera y, en particular, para la producción automotriz mundial. Además, este asunto “representa una fuente de volatilidad en el mercado financiero, observándose recomposiciones de portafolios hacia instrumentos financieros de bajo riesgo, denominados en moneda de reserva y emitidos por economías avanzadas.”

En general, con estos Precriterios el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, está reafirmando el compromiso de mantener los equilibrios fiscales y macroeconómicos, garantizando el bienestar de las y los mexicanos. Y reconoce como motores de crecimiento y bienestar a la inversión en infraestructura, el mercado interno y el comercio exterior, estos últimos impulsados por la interconectividad que propicice la inversión.

En ese sentido, la política fiscal que la 4T se está planteando para la segunda mitad de la presenta administración se basa en: 1) Finanzas públicas sanas, 2) una trayectoria decreciente de la deudad pública, y 3) incrementar la recaudación a través del combate a la evasión y elusión fiscal.

Finalmente, es de destacarse que frente a la incertidumbre ocasionada por la aparición de la guerra y una inflación persistente importada del exterior debido al shock de oferta que está padeciendo el mercado global, el gobierno federal ratifica la consolidación del apoyo a las políticas públicas de salud y sobre todo al programa de vacunación y la estrategia en general para superar integralmente los estragos de la pandemia del Covid-19.

*Secretario de Salud del Estado de Sinaloa.