/ lunes 17 de diciembre de 2018

Navolato, primero en marcar la diferencia



En Navolato se sienten nuevos vientos. El alcalde petista-morenista Eliazar Gutiérrez Ángulo resultó ser un hábil operador político y la gente vive un ambiente distinto al de muchos años. A tal grado que consideran que se encontraron un gobierno municipal de puertas abiertas. Distinto al que se ejerce en las grandes plazas del estado en las que también derrocaron al PRI el primero de julio.

Los primeros que lo aseguran asi son los pobladores de a pie, los que se encuentran con frecuencia al munícipe por la calle, y pueden platicar sin necesidad de solicitar una audiencia, sobre los problemas. Sobre lo se necesita hacer en sus colonias o comunidades.

La clase trabajadora organizada del Ayuntamiento, es otra, de las que se sorprendió en días pasados cuando a las instalaciones del viejo Taller Municipal el residente de Villa Ángel Flores llegó sin previo aviso y los saludó a todos de mano. Les gradeció el esfuerzo que en condiciones adversas, realizan diariamente por mejorar los servicios públicos de los navolatenses.

En ese lugar donde se concentra gran parte del personal de Aseo y Limpia y de los que le entran a las labores que muchos detestan, Eliazar Gutiérrez Ángulo compartió el pan y la sal con los presentes.

Les dio mucho gusto cuando el titular del Ejecutivo Municipal se puso a su altura. Los trató con el respeto que estila con toda la ciudadanía y saboreó en su comedor improvisado, los tacos de chicharrón de puerco que luego bajaron con refrescos.

Conversaron y en ese proceso de convivio inesperado le soltaron parte de cómo son las cosas y como quisieran que fueran avanzar más. Aprovecharon esos momentos para intercambiar impresiones, que en realidad, servirán mucho a la administración, porque es un sector laboral, que recorre todo el mapa de la cabecera central o de las sindicaturas y miden el sentir de los pobladores. Saben de las carencias y de lo que desean las familias.

Y en se clima, sin que les fuerce o se les amenace, los burócratas por iniciativa propia, hasta se comprometieron a trabajar más por el pueblo.

Lo más importante, es que comprueban a diario que en este municipio, no se sufren la soberbia y la prepotencia que a través de los medios de comunicación, constatan que se registra en otros ayuntamientos, donde hay una lucha entre los que arribaron al poder y los líderes de los gremios, que son alertados por los sindicalizados que ven en riesgo sus derechos y prestaciones.

Eliazar Gutiérrez Ángulo, se inscribió como el primero de los ediles, de los ochos que ganaron en alianza con Morena, en hacer la diferencia.




En Navolato se sienten nuevos vientos. El alcalde petista-morenista Eliazar Gutiérrez Ángulo resultó ser un hábil operador político y la gente vive un ambiente distinto al de muchos años. A tal grado que consideran que se encontraron un gobierno municipal de puertas abiertas. Distinto al que se ejerce en las grandes plazas del estado en las que también derrocaron al PRI el primero de julio.

Los primeros que lo aseguran asi son los pobladores de a pie, los que se encuentran con frecuencia al munícipe por la calle, y pueden platicar sin necesidad de solicitar una audiencia, sobre los problemas. Sobre lo se necesita hacer en sus colonias o comunidades.

La clase trabajadora organizada del Ayuntamiento, es otra, de las que se sorprendió en días pasados cuando a las instalaciones del viejo Taller Municipal el residente de Villa Ángel Flores llegó sin previo aviso y los saludó a todos de mano. Les gradeció el esfuerzo que en condiciones adversas, realizan diariamente por mejorar los servicios públicos de los navolatenses.

En ese lugar donde se concentra gran parte del personal de Aseo y Limpia y de los que le entran a las labores que muchos detestan, Eliazar Gutiérrez Ángulo compartió el pan y la sal con los presentes.

Les dio mucho gusto cuando el titular del Ejecutivo Municipal se puso a su altura. Los trató con el respeto que estila con toda la ciudadanía y saboreó en su comedor improvisado, los tacos de chicharrón de puerco que luego bajaron con refrescos.

Conversaron y en ese proceso de convivio inesperado le soltaron parte de cómo son las cosas y como quisieran que fueran avanzar más. Aprovecharon esos momentos para intercambiar impresiones, que en realidad, servirán mucho a la administración, porque es un sector laboral, que recorre todo el mapa de la cabecera central o de las sindicaturas y miden el sentir de los pobladores. Saben de las carencias y de lo que desean las familias.

Y en se clima, sin que les fuerce o se les amenace, los burócratas por iniciativa propia, hasta se comprometieron a trabajar más por el pueblo.

Lo más importante, es que comprueban a diario que en este municipio, no se sufren la soberbia y la prepotencia que a través de los medios de comunicación, constatan que se registra en otros ayuntamientos, donde hay una lucha entre los que arribaron al poder y los líderes de los gremios, que son alertados por los sindicalizados que ven en riesgo sus derechos y prestaciones.

Eliazar Gutiérrez Ángulo, se inscribió como el primero de los ediles, de los ochos que ganaron en alianza con Morena, en hacer la diferencia.