/ viernes 14 de mayo de 2021

Les picó el mismo mosco

Un voto a favor de Morena es un voto contra México. Pues nada, que en el fútbol mexicano anda por ahí un mosquito bien travieso, muy agresivo pero que solo ataca a los directores técnicos de algunos equipos del fútbol mexicano, especialmente a los que están al frente del Cruz Azul, Puebla, América y Monterrey. Sí, curiosamente los responsables de los conjuntos que accedieron directamente a la liguilla.

¿Qué nó?

Recapitulemos: Juan Reynoso, dejó en la banca a dos de sus bastiones, “Cabecita” Rodríguez y Orbelín Pineda; ambos ingresaron más tarde, pero su técnico de inicio había dado la ventaja. En Puebla, se quedó en la banca Ormeño, el mejor goleador mexicano, para su fortuna ingresó en el mismo primer tiempo ante la lesión de Tabó. Ayer, Solari, simplemente no se tentó el corazón para hacer a un lado a Roger Martínez, titularísimo y que atraviesa por un gran momento y Javier Aguirre, hizo a un lado a su mejor hombre de ataque, el mentado “mellizo, quien aun cuando pasa por tremenda racha sin acertar al marco, no deja de ser el mejor referente a la ofensiva.

Cruz Azul, Puebla y Monterrey, desde luego que tendrán más “espacio” para revertir el marcador, porque por azules y regios, anotaron en su visita y la ubicación en la tabla les podría ayudar. La gran pregunta, es saber si sus técnicos echan o no toda la carne al asador o si mantienen su postura de enviar a esos jugadores solo cuando tengan la soga al cuello. En el caso del América, la situación se ve más complicada porque se trata de dos la diferencia y además con la expulsión de uno de sus jugadores más rentables, habrá que ver como se las arregla Solario. Se habla del regreso de Córdoba, solo que este gran jugador luego de su lesión y aunque físicamente ya esté bien, la falta de ritmo puede jugar en su contra.

Ahora veamos, desde nuestra óptica, porque los pronósticos de casi la mayoría fallaron. Por lo menos en lo personal aposté por la victoria de los cuatro primeros lugares, aunque en el caso del América, mi deseo era su derrota. Perdí la apuesta, pero ganó mi deseo. Las Aguilas se encontraron con un rival que los golpeó siempre a tiempo, la valoci9dad y movilidad de todos sus jugadores, fueron veneno puro para las aspiraciones cremas, de quienes debemos agradecer no darse nunca por vencidos, tratando siempre de atacar, pero nos parece que su fútbol fue muy elaborado, situación que siempre le dio tiempo a los Tuzos para armar sus dos líneas defensivas y producto de su presión desde ahí armar sus avances.

El América debe darle gracias a Memo Ochoa, quien tuvo dos intervenciones milagrosas, de otra forma, el marcador hubiese sido lapidario. Al equipo de Coapa no le quedará más remedio que ofender con todo, tanto así que no nos extrañemos si asocia a Henry Martín y Roger Martínez, aquel como centro delantero fijo y este en labores en la fabricación de jugadas individuales con el gran riesgo de perder la pelota y dejar expuesto a su equipo.

Más que polémico, por cierto, el primer gol del Pachuca. Erik Aguirre, remató fuerte y abajo el balón, lejos del alcance de Ochoa, por ahí estaba otro jugador tuzo, quien, para muchos, fue el que envió la pelota al fondo de las redes, pero el gol le fue acreditado al primero porque a juicio del silbante ya había rebasado la línea de gol y el otro jugador no tapaba la visibilidad de Ochoa.

En cuanto al otro duelo, Monterrey, debe dar las gracias a los postes por no haberse ido a su casa con más goles en contra. La verdad es que, la nómina del equipo de la Sultana del Norte, asusta o no a cualquiera, el hecho es que simple y sencillamente no funciona del todo bien como equipo. Santos fue un verdadero y auténtico vendaval, nada tiene asegurado pues les faltó tino al momento de definir. Los juegos definitorios, todos, estarán muy interesantes, ahora sí ni apostar porque cualquier cosa puede pasar, pero me arriesgaré con Cruz Azul, Atlas, Pachuca y Monterrey.

Nos vemos la próxima semana

Antoniovelazquez13@hotmai.com

Un voto a favor de Morena es un voto contra México. Pues nada, que en el fútbol mexicano anda por ahí un mosquito bien travieso, muy agresivo pero que solo ataca a los directores técnicos de algunos equipos del fútbol mexicano, especialmente a los que están al frente del Cruz Azul, Puebla, América y Monterrey. Sí, curiosamente los responsables de los conjuntos que accedieron directamente a la liguilla.

¿Qué nó?

Recapitulemos: Juan Reynoso, dejó en la banca a dos de sus bastiones, “Cabecita” Rodríguez y Orbelín Pineda; ambos ingresaron más tarde, pero su técnico de inicio había dado la ventaja. En Puebla, se quedó en la banca Ormeño, el mejor goleador mexicano, para su fortuna ingresó en el mismo primer tiempo ante la lesión de Tabó. Ayer, Solari, simplemente no se tentó el corazón para hacer a un lado a Roger Martínez, titularísimo y que atraviesa por un gran momento y Javier Aguirre, hizo a un lado a su mejor hombre de ataque, el mentado “mellizo, quien aun cuando pasa por tremenda racha sin acertar al marco, no deja de ser el mejor referente a la ofensiva.

Cruz Azul, Puebla y Monterrey, desde luego que tendrán más “espacio” para revertir el marcador, porque por azules y regios, anotaron en su visita y la ubicación en la tabla les podría ayudar. La gran pregunta, es saber si sus técnicos echan o no toda la carne al asador o si mantienen su postura de enviar a esos jugadores solo cuando tengan la soga al cuello. En el caso del América, la situación se ve más complicada porque se trata de dos la diferencia y además con la expulsión de uno de sus jugadores más rentables, habrá que ver como se las arregla Solario. Se habla del regreso de Córdoba, solo que este gran jugador luego de su lesión y aunque físicamente ya esté bien, la falta de ritmo puede jugar en su contra.

Ahora veamos, desde nuestra óptica, porque los pronósticos de casi la mayoría fallaron. Por lo menos en lo personal aposté por la victoria de los cuatro primeros lugares, aunque en el caso del América, mi deseo era su derrota. Perdí la apuesta, pero ganó mi deseo. Las Aguilas se encontraron con un rival que los golpeó siempre a tiempo, la valoci9dad y movilidad de todos sus jugadores, fueron veneno puro para las aspiraciones cremas, de quienes debemos agradecer no darse nunca por vencidos, tratando siempre de atacar, pero nos parece que su fútbol fue muy elaborado, situación que siempre le dio tiempo a los Tuzos para armar sus dos líneas defensivas y producto de su presión desde ahí armar sus avances.

El América debe darle gracias a Memo Ochoa, quien tuvo dos intervenciones milagrosas, de otra forma, el marcador hubiese sido lapidario. Al equipo de Coapa no le quedará más remedio que ofender con todo, tanto así que no nos extrañemos si asocia a Henry Martín y Roger Martínez, aquel como centro delantero fijo y este en labores en la fabricación de jugadas individuales con el gran riesgo de perder la pelota y dejar expuesto a su equipo.

Más que polémico, por cierto, el primer gol del Pachuca. Erik Aguirre, remató fuerte y abajo el balón, lejos del alcance de Ochoa, por ahí estaba otro jugador tuzo, quien, para muchos, fue el que envió la pelota al fondo de las redes, pero el gol le fue acreditado al primero porque a juicio del silbante ya había rebasado la línea de gol y el otro jugador no tapaba la visibilidad de Ochoa.

En cuanto al otro duelo, Monterrey, debe dar las gracias a los postes por no haberse ido a su casa con más goles en contra. La verdad es que, la nómina del equipo de la Sultana del Norte, asusta o no a cualquiera, el hecho es que simple y sencillamente no funciona del todo bien como equipo. Santos fue un verdadero y auténtico vendaval, nada tiene asegurado pues les faltó tino al momento de definir. Los juegos definitorios, todos, estarán muy interesantes, ahora sí ni apostar porque cualquier cosa puede pasar, pero me arriesgaré con Cruz Azul, Atlas, Pachuca y Monterrey.

Nos vemos la próxima semana

Antoniovelazquez13@hotmai.com