A inicio de este mes se publicó el estudio Latinobarómetro 2021 sobre el estado que guarda la democracia en la estima y la valoración de los ciudadanos del continente americano, exceptuando en el análisis, los dos países anglosajones del norte: Estados Unidos de Norteamérica y Canadá.
Este prestigiado estudio es elaborado anualmente por una corporación privada, la cual como indica en su página, “es una ONG sin fines de lucro con sede en Santiago de Chile que investiga el desarrollo de la democracia, la economía y la sociedad en su conjunto, usando indicadores de opinión pública que miden actitudes, valores y comportamientos. Los resultados son utilizados por los actores socio políticos de la región, actores internacionales, gubernamentales y medios de comunicación”. Su financiamiento proviene de fondos de múltiples organismos internacionales, países y fondos privados para “producir una medición cada año”.
Las encuestas se aplicaron cara a cara en 17 países, entre el 26 de octubre y el 15 de diciembre del 2020. Fueron un total de 19,004 entrevistas domiciliarias y 1,200 entrevistas vía panel on line. En diez países suramericanos y en México se aplicaron muestras de 1,200 casos a los ciudadanos de 18 años y más (16 años en Brasil), y 1,000 casos en los seis países de Centroamérica y en la República Dominicana. El margen de error de las muestras nacionales es de 3 % y el margen de error de la base total es de 1%.
Sin duda la peculiaridad de esta edición que influyó en la logística y estado anímico proviene de que las entrevistas se aplicaron a fines del año pasado, cuando la humanidad enfrentaba a la mayor de las pandemias en los tiempos contemporáneos, justo en la etapa en que cobraba vigencia lo que se denominó como la segunda ola de contagios de la contingencia del Covid-19 en el mundo.
En general, el estudio de este año no muestra resultados halagüeños, podemos decir incluso que sus conclusiones son pesimistas, pues registran un desencanto de los ciudadanos con el desempeño de las democracias latinoamericanas. Los resultados demuestran el descontento social de los ciudadanos, hastiados ya de las desigualdades en que viven y que los gobiernos no han podido resolver.
Y debido a dicho ambiente, Latinobarómetro hace la siguiente observación: “Una ola recorre América Latina consecuencia del egoísmo de las élites, es la ola de la escasez de mayorías. En este último ciclo electoral los nuevos presidentes enfrentan creciente atomización de los parlamentos, aumento de movimientos y partidos nuevos, así como el fin de los viejos. La gobernabilidad se aleja, augurando tiempos complejos para la región. Es que los latinoamericanos ya no toleran los gobiernos que defienden los intereses de unos pocos, la concentración de la riqueza, la escasez de justicia, la debilidad de las garantías civiles y políticas, así como la tardanza en la construcción de garantías sociales. El abuso de poder, los privilegios, la restricción de la pluralidad están en el corazón de la demanda de igualdad ante la ley, de respeto, de dignidad.”
En síntesis, los principales datos generales que arroja el Latinobarómetro 2021 son los que a continuación señalo: actualmente, el 49% de los latinoamericanos prefiere la democracia sobre cualquier otra forma de gobierno; pero un 13% está dispuesto a apoyar un gobierno autoritario y a un 27% le da lo mismo. En el caso de nuestro país, el 43% de los mexicanos manifiesta su apoyo a la democracia sobre cualquier otra forma de gobierno. Asimismo, mientras el 45% de los latinoamericanos considera que en su país la democracia “tiene grandes problemas”, en México esta noción la comparten el 47 % de los ciudadanos.
Como corolario, no sin antes recomendar ampliamente su consulta y los muchísimos datos sociopolíticos que contiene, podemos afirmar que en Latinoamérica estamos frente a un reto nada novedoso, pero urgente de atender: la democracia requiere resultados concretos en la calidad de vida, la economía y la prosperidad de la gente; de lo contrario, seguirá oscilando entre la indiferencia y un respaldo tibio de los ciudadanos a sus gobiernos.
Culiacán Sinaloa, a 18 de octubre del 2021.
Cuídense y si pueden quédense en casa.
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