¿La niñez importa?

En México, el número de Niñas, Niños y Adolescentes en pobreza es de 49.6%, mayor al de adultos qué es de 38.4% (CONEVAL, 2018). 23.9% de Niñas, Niños y Adolescentes, sufren carencias alimenticias (CONEVAL, 2018). La sexta causa de muerte en mujeres de 15 a 24 años, son las complicaciones relacionadas con el embarazo, parto y puerperio (INEGI, 2017), asimismo se advierte una tendencia creciente en nacimientos en niñas y adolescentes de 10 a 14 años (SALUD, 2020).

Estos son algunos de los indicadores que sustentan la actual política pública en materia de Niñez y Adolescencia, publicadas en el Diario Oficial de la Federación, el pasado 31 de diciembre de 2021, que contienen el decreto que aprueba el Programa Nacional de Protección a Niñas, Niños y Adolescentes y el Programa Nacional de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes 2021-2024 (PRONAPINNA).

El PRONAPINNA 2021-2024 llega 3 años después al arribo del Presidente de la Izquierda, recordemos que con el cambio de poderes en el ámbito federal, el Sistema Nacional de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes mantuvo al mismo Secretario Ejecutivo Ricardo Bucio hasta febrero de 2021 cuando presentó su renuncia, hoy se encuentra Constanza Tort San Román como jefa de despacho, asimismo que para elaboración de un programa nacional se requieren procesos como consultas a organismos de la sociedad civil especializados en la materia, elaboración de diagnósticos y propuestas alineadas al Plan Nacional de Desarrollo, tardío en comparación a otros planes de trabajo como el PROIGUALDAD que se publicó en el DOF el 22 de diciembre de 2020.

Se plantean objetivos, estrategias y acciones que abordan cuatro importantes aristas: 1) Supervivencia, 2) Desarrollo, 3) Violencia, y 4) Adultocentrismo que excluye a Niñas, Niños y Adolescentes de las decisiones relacionadas con su desarrollo. Las cuales deberán llevarse a cabo en forma coordinada a través de 55 dependencias y entidades de la Administración Pública Federal. No se hace referencia al contexto de pandemia que actualmente vivimos, y tampoco se proponen líneas de acción al respecto.

La Supervivencia de las Niñas, Niños y Adolescentes, se entiende en el programa como acceso a la salud, seguridad social, alimentación adecuada, salud mental, prevención y atención integral de las adicciones, derecho a la identidad y derechos sexuales y reproductivos, esta última que puede verse en peligro ante las propuestas arcaicas, doctrinarias y religiosas como las de PIN PARENTAL que pretenden evitar los contenidos en materia de educación sexual en los planes y programas de estudio.

El Desarrollo en relación al acceso a la educación, vivienda, bienestar, y medio ambiente, que arrastran los problemas de rezago escolar, inasistencia a las escuelas y la falta de condiciones en los planteles, entre otros. No se mencionan indicadores en relación al medio ambiente, al equilibrio ecológico, o cambio climático.

Las Niñas, Niños y Adolescentes como victimas del delito y la violencia en sus distintas formas, con efectos en la explotación infantil que en el 2019, 7.1 % de Niñas, Niños y Adolescentes 5 a 17 años realizaba un trabajo u ocupación no permitida (INEGI).

2, 398 asesinatos de menores (SESNP). 16, 814 egresos hospitalarios por afectaciones y lesiones, la mayor parte violencia psicológica y sexual (SALUD, 2020). Llama la atención qué de 26, 034 adolescentes inculpados ante el ministerio público por la comisión de un delito, 16.2% son mujeres y 81.02% son hombres (INEGI, 2019).

La Discriminación y enfoque Adultocentrista que ve a las niñas, niños y adolescentes como extensiones de los adultos, incapaces, usados como objetos o botines en medio de separaciones familiares, y divorcios, que anulan sus derechos, 22.5% de niñas entre 9 y 11 años, y 36% de adolescentes entre 12 y 17 años, consideran que sus derechos se respetan poco o nada (ENADIS, 2017).

Los hechos acontecidos en el último mes del año 2021, con los asesinatos de Valentina y Alma Delia nos hicieron un nudo en la garganta, las dependencias del estado condenaron estos actos, y la fiscalía general actuó en consecuencia con la detención de los presuntos responsables, seria interesante conocer ¿cual es la postura del Centro Estatal de Prevención y Participación Ciudadana (CEPREVSIN)? o ¿seguirá escondiendo la cabeza como si se tratase de un avestruz? Es inverosímil que algunas dependencias como esta, que cuentan con tanto prepuesto, no les alcance ni para emitir una opinión técnica acerca de estos temas ya no pedimos una sensible mínimo.