/ jueves 14 de noviembre de 2019

Ética y solidaridad, colegios de abogados

Los principios de ética profesional, honestidad, estudio permanente, eficiencia, cortesía, independencia, solidaridad, equidad y, a falta de aranceles, equidad en el cobro de honorarios, son los que deben regir la actividad de los profesionistas.

La ética, para actuar con profesionalismo, con disposición de resolver en favor del cliente, con lealtad a quienes se sirve, con honestidad y humildad, y tener el ánimo de asumir las responsabilidades.

La solidaridad, para en primer término, tomar el lugar de la persona que lo contrata, para ejercer las acciones en su beneficio, lo cual se reflejará en los honorarios que deberán ser justos y acordes con el servicio prestado.

1. LEY DE PROFESIONISTAS

Los principios citados, se contemplan en la Ley de Profesiones del Estado de Sinaloa, que se publicó en el Periódico Oficial “El Estado de Sinaloa”, el 27 de septiembre de 2019. La cual abrogó la Ley de Profesiones para el Estado de Sinaloa, publicada en el Periódico Oficial “El Estado de Sinaloa”, el 2 de septiembre de 2016.

Como se observa es una ley nueva, que debe ser divulgada y conocida para que se le dé debido cumplimiento, sobre todo, para que pueda servir de mejor manera, tanto a los profesionistas, a los colegios de profesionistas y a los usuarios de los servicios que se prestan.

Con ese propósito, se tuvo una plática con la Asociación de Colegios y Asociaciones de Abogados de Sinaloa, integrada por los colegios “Profr. y Lic. Rodolfo Monjaraz Buelna”, que preside la Lic. Maribel Calderón Hernández; “Mariano Otero”, bajo la presidencia del Lic. Rubén Beltrán Juárez; “Norma Corona Sapiens”, que preside el Lic. Jesús Martínez Peñuelas; y “Eleuterio Ríos Espinoza”, con la presidencia del Lic. Alfonso Castro López.

2. ATRIBUCIONES DE LOS COLEGIOS DE PROFESIONISTAS

En esa ocasión, por la naturaleza de la reunión, se tocaron, de manera principal, el tema de las atribuciones de los colegios de profesionistas, entre las que se destacan la de promover la expedición de normas relativas al ejercicio profesional.

En el apartado de la participación ciudadana, contribuir en los procesos de consulta para la integración de proyectos de creación, reforma o adición de leyes y reglamentos.

Se les da intervención para revisar y, en su caso, proponer los aranceles para los profesionistas, de acuerdo a su profesión o rama profesional, mediante una iniciativa de ley o con aportaciones a las existentes en el Congreso del Estado.

En la medida de sus posibilidades, prestar la más amplia colaboración a los Gobiernos Federal, Estatal y Municipales como órganos consultores, cuando aquéllos lo soliciten y así se acuerde en sus asambleas.

Elaborar el Código de Ética, como un documento indispensable, en la actualidad, para conducir las relaciones entre los colegiados y con la sociedad en general.

En el plano educativo, está el de colaborar en la elaboración de los programas y planes de estudio profesional relacionados con su rama profesional, cuando se los soliciten las instituciones educativas que funcionen en el Estado. Así como, participar o hacerse representar en los congresos relativos al ejercicio profesional.

Y como un aspecto a rescatar, por ser de sentido social y de solidaridad, brindar un servicio social a la población, que sea profesional, eficiente y de calidad.

Existe mucho que hacer. Los colegios tienen la palabra.

Los principios de ética profesional, honestidad, estudio permanente, eficiencia, cortesía, independencia, solidaridad, equidad y, a falta de aranceles, equidad en el cobro de honorarios, son los que deben regir la actividad de los profesionistas.

La ética, para actuar con profesionalismo, con disposición de resolver en favor del cliente, con lealtad a quienes se sirve, con honestidad y humildad, y tener el ánimo de asumir las responsabilidades.

La solidaridad, para en primer término, tomar el lugar de la persona que lo contrata, para ejercer las acciones en su beneficio, lo cual se reflejará en los honorarios que deberán ser justos y acordes con el servicio prestado.

1. LEY DE PROFESIONISTAS

Los principios citados, se contemplan en la Ley de Profesiones del Estado de Sinaloa, que se publicó en el Periódico Oficial “El Estado de Sinaloa”, el 27 de septiembre de 2019. La cual abrogó la Ley de Profesiones para el Estado de Sinaloa, publicada en el Periódico Oficial “El Estado de Sinaloa”, el 2 de septiembre de 2016.

Como se observa es una ley nueva, que debe ser divulgada y conocida para que se le dé debido cumplimiento, sobre todo, para que pueda servir de mejor manera, tanto a los profesionistas, a los colegios de profesionistas y a los usuarios de los servicios que se prestan.

Con ese propósito, se tuvo una plática con la Asociación de Colegios y Asociaciones de Abogados de Sinaloa, integrada por los colegios “Profr. y Lic. Rodolfo Monjaraz Buelna”, que preside la Lic. Maribel Calderón Hernández; “Mariano Otero”, bajo la presidencia del Lic. Rubén Beltrán Juárez; “Norma Corona Sapiens”, que preside el Lic. Jesús Martínez Peñuelas; y “Eleuterio Ríos Espinoza”, con la presidencia del Lic. Alfonso Castro López.

2. ATRIBUCIONES DE LOS COLEGIOS DE PROFESIONISTAS

En esa ocasión, por la naturaleza de la reunión, se tocaron, de manera principal, el tema de las atribuciones de los colegios de profesionistas, entre las que se destacan la de promover la expedición de normas relativas al ejercicio profesional.

En el apartado de la participación ciudadana, contribuir en los procesos de consulta para la integración de proyectos de creación, reforma o adición de leyes y reglamentos.

Se les da intervención para revisar y, en su caso, proponer los aranceles para los profesionistas, de acuerdo a su profesión o rama profesional, mediante una iniciativa de ley o con aportaciones a las existentes en el Congreso del Estado.

En la medida de sus posibilidades, prestar la más amplia colaboración a los Gobiernos Federal, Estatal y Municipales como órganos consultores, cuando aquéllos lo soliciten y así se acuerde en sus asambleas.

Elaborar el Código de Ética, como un documento indispensable, en la actualidad, para conducir las relaciones entre los colegiados y con la sociedad en general.

En el plano educativo, está el de colaborar en la elaboración de los programas y planes de estudio profesional relacionados con su rama profesional, cuando se los soliciten las instituciones educativas que funcionen en el Estado. Así como, participar o hacerse representar en los congresos relativos al ejercicio profesional.

Y como un aspecto a rescatar, por ser de sentido social y de solidaridad, brindar un servicio social a la población, que sea profesional, eficiente y de calidad.

Existe mucho que hacer. Los colegios tienen la palabra.