Quienes esperábamos un partido con muchas emociones, nos quedamos suspirando de ese deseo, simplemente porque Cruz Azul y Pachuca, determinaron antes que nada no recibir gol, que trabajar a fondo por hacerse daño y dejar todo para el segundo partido programado para el día de mañana en el estadio Azteca. En lo personal, fue decepcionante, pero en el aspecto estrictamente táctico, escudriñar la intención de ambos técnicos, nos llevó a la conclusión arriba señalada y a terminar o tratar de entender, el por qué ambos arriesgaron a dejar absolutamente todo para el segundo episodio.
El fútbol, como en otras disciplinas, lo interesante del asunto en relación con el gusto de los aficionados, es la diversidad de opiniones a favor o en contra de la determinación de los responsables de las tácticas. En el balompié, todos los equipos, tienen su estilo propio, esto no quiere decir que sea único, porque bien puede ser un 4-3-3 un sistema utilizado como su principal estrategia, pero a partir de ahí, obviamente trabajan con variantes aplicadas de acuerdo a dos puntos: el marcador y sus opciones en cuanto a lo que tienen en la banca.
Ahí está el detalle.
Mire usted, sin duda alguna que los cementeros, en este último aspecto, tienen más tela de donde cortar, tanto así que se pueden dar el lujo de dejar en la banca, por ejemplo, a un Orbelin Pineda, pero, además cuenta con otros elementos que en el papel, son de mayor peso que con los que cuenta el alto mando del Pachuca, un equipo que le ha dado oportunidad a muchos jóvenes, estos han ido creciendo, lograron en esta recta final encontrar el camino al gol, pero En el juego ante Cruz Azul, sin duda alguna jugó un papel muy importante la formación para impedirles explotar sus habilidades.
Y, al contrario, Pachuca, a base de mucha movilidad, de sus jóvenes con enorme capacidad física, trabajaron mucho mejor el aspecto defensivo, en las ocasiones que corrieron el riesgo de tratar de pisar el acelerador y ofender, tuvieron tres serios problemas que no terminaron en gol porque el ataque de Cruz Azul no tuvo muchos hombres al frente cuando la situación se les presentó de entrar al área.
Los cementeros, desde nuestra óptica, dejaron de escapar la oportunidad de tomar más ventaja que la proporcionada por su sitio en la tabla. Para mañana, cualquier empate con goles, favorecerá a los Tuzos, situación que llevará a ambos técnicos a salir con otra mentalidad, conforme pase el tiempo y el gol no llegue Pachuca tendrá que arriesgar, Cruz Azul, sabe que un gol puede no bastarle, así es que para asegurar tendría que por lo menos hacer dos. Interesante sin duda será ver, la estrategia de ambos técnicos, creemos que ambos, ahora sí enviaran a sus mejores hombres con la determinación de hacer real daño a la ofensiva. De otra forma, sería decepcionante. Entre un juego de condiciones similares al protagonizado por América y Pachuca, y otro como el de ayer, hay un solo paso.
En cuanto al duelo de esta noche, mucho se ha dicho y hablado sobre el tradicional caballo negro que surge siempre en una liguilla, o casi siempre, en este caso el Puebla; la realidad es que nada que ver una plantilla con otra. Santos luce muy superior en todos aspectos. Hoy jugará en calidad de local, obligado a ganar y evitar goles en contra. Sin duda esperamos a un Puebla bien armado abajo con la esperanza de que le hagan el menor daño posible y por ahí dar la campanada, situación harto complicada ante un equipo tan explosivo como Santos.
Nos vemos la próxima semana
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