/ jueves 11 de noviembre de 2021

Enrique Inzunza Cázares es quien gobierna Sinaloa

De acuerdo a una encuestadora nacional, el gobernador Rubén Rocha Moya, es el mandatario mejor evaluado del país, sin embargo, en Sinaloa se rumora, se dice y los dichos los acompañan con “hechos”, de que quien gobierna en Sinaloa es Enrique Inzunza Cázares.

Los datos. Antes de llegar a la Secretaría de Gobierno, empezó el ajedrez “institucional”, moviendo sus piezas.

De inmediato buscó la destitución del Fiscal incómodo, Ríos Estavillo, todo porque lo balconeó cuando era Presidente del Supremo Tribunal de Justicia de que era “mañocito” al acosar a una de las secretarias de ese institución, en ese momento por andar de bocón el Fiscal cabo su tumba, de manera soterrada lo destituyeron pese a que la ley lo protegía.

En la ciudadanía quedó la incógnita de como un abogado de la talla de Ríos Estavillo dobló las manos tan fácilmente y presentó su renuncia ante el Congreso del estado, ¿le sabían algo? ¿Lo amenazaron?, la respuesta sólo los involucrados la pueden dar.

El primero de Noviembre empezó la era Inzunza Cázares, con la voracidad de acaparar los puestos que más se puedan, aquí no cabe la Cuarta Transformación que tanto presume Morena, amigos y familiares se están acomodando en puestos claves.

Poco antes –diciembre 2020-, Aída Inzunza, hermana de Enrique, fue electa como Magistrada del Supremo Tribunal de Justicia.

Luego Santiago, hermano también del Secretario General de gobierno –cuatro de noviembre-, rindió protesta como director general de Cobaes.

Ahora el Secretario General de Gobierno va por dos Magistraturas.

En la primera Magistratura, en la terna está su esposa Claudia Yuridia Meza Avendaño y en la magistratura III la terna está compuesta por su amigo Jesús Iván Chávez Rangel, sólo falta que los legisladores lo voten, aunque se dice que ya todo está planchado y de un momento a otro la mayoría del Poder Judicial estará en manos del Secretario General de Gobierno.

Y sigue la mata dando, en febrero del 2021, Liliana Margarita Campuzano Vega, tomó protesta como Comisionada de la Comisión Estatal para el Acceso a la Información Pública y ya se alista para ser la Presidenta de la CEAIP, al concluir su mandato José Alfredo Beltran.

Liliana Margarita, es hermana de la magistrada María Bárbara Irma Campuzano Vega, quien forma parte de los afectos de Inzunza.

Sí las estrellas sigan alineadas el próximo jueves, podría elegirse a la Fiscal carnal de Inzunza Cázares, Sara Bruna Quiñonez Estrada. Sólo falta que los diputados levanten el dedo para quedar bien con el señor.

Estos son algunos de los casos que se han ventilado, pero tenga la seguridad que si se le sigue buscando, Inzunza Cázares en un descuido y todos los puestos los acapara porque tal parece que no tiene llenadera y no hay quien le ponga un alto a su nepotismo, ni Morena mucho menos la poca oposición que hay en Sinaloa.

Estrada contra los medios de comunicación

Si se pensaba que el alcalde de Culiacán ya dejaría de actuar en contra de los medios de comunicación, pues la verdad es que se pensó mal, porque hay información en el sentido que desde su cuarto de propaganda se opera una estrategia de contención de las críticas arrojadas por la prensa.

Y es que desde nunca, a Jesús Estrada Ferreiro le ha incomodado la crítica y disfraza su intolerancia de aquel viejo traje de que los medios le inventan cosas o simplemente no citan bien sus palabras, por eso prefiere pagarle más a programas de radio que le abren el micrófono enteramente y no a medios escritos, que no logran captar su quintaesencia de esa mágica sabiduría con la que ejerce el poder municipal en Culiacán.

Por un lado, el señor alcalde siempre jura que él cumple con la ley y que respeta la Constitución, pero luego su carácter atrabiliario se enseñorea en querer voltear mentiras en verdades; como aquella en la que asegura que los descuentos que se le otorgan a pensionados, jubilados y personas con discapacidad son anticonstitucionales debido a que el artículo 28 constitucional prohíbe la exención de impuestos… pero. La verdad sea dicha, un descuento por pronto pago no es una exención.

Según el diccionario de dudas, exención significa: “Efecto de eximir a una persona de una carga, culpa, obligación o compromiso.” Es decir, la Ley de Hacienda Municipal no exenta a nadie, sólo les otorga un apoyo en forma de descuento.

Lo mismo procede para el agua potable. La Ley de Agua Potable de Sinaloa precisa que hay descuento del 50% a jubilados y pensionados que no excedan los 50 metros cúbicos de agua de manera mensual. Es decir, el marco normativo impone limitaciones.

Estrada dice respetar mucho la Ley, pero no respeta el decreto que otorga derechos salariales a policías y viudas. En otras palabras, parece que Estrada desde la distorsión su óptima, respetar la Ley es respetar sólo aquello que a él le parece justo, no la normatividad común.

Por eso, desde su oficina de comunicación, ante la imposibilidad de articular una política efectiva de informar, se prefiere la ignominia del descrédito, al trabajo bien realizado para evitar las más feroces y ramplonas críticas, como quizá pueda recaer ésta, claro, desde su óptica leguleya. Al tiempo.

De acuerdo a una encuestadora nacional, el gobernador Rubén Rocha Moya, es el mandatario mejor evaluado del país, sin embargo, en Sinaloa se rumora, se dice y los dichos los acompañan con “hechos”, de que quien gobierna en Sinaloa es Enrique Inzunza Cázares.

Los datos. Antes de llegar a la Secretaría de Gobierno, empezó el ajedrez “institucional”, moviendo sus piezas.

De inmediato buscó la destitución del Fiscal incómodo, Ríos Estavillo, todo porque lo balconeó cuando era Presidente del Supremo Tribunal de Justicia de que era “mañocito” al acosar a una de las secretarias de ese institución, en ese momento por andar de bocón el Fiscal cabo su tumba, de manera soterrada lo destituyeron pese a que la ley lo protegía.

En la ciudadanía quedó la incógnita de como un abogado de la talla de Ríos Estavillo dobló las manos tan fácilmente y presentó su renuncia ante el Congreso del estado, ¿le sabían algo? ¿Lo amenazaron?, la respuesta sólo los involucrados la pueden dar.

El primero de Noviembre empezó la era Inzunza Cázares, con la voracidad de acaparar los puestos que más se puedan, aquí no cabe la Cuarta Transformación que tanto presume Morena, amigos y familiares se están acomodando en puestos claves.

Poco antes –diciembre 2020-, Aída Inzunza, hermana de Enrique, fue electa como Magistrada del Supremo Tribunal de Justicia.

Luego Santiago, hermano también del Secretario General de gobierno –cuatro de noviembre-, rindió protesta como director general de Cobaes.

Ahora el Secretario General de Gobierno va por dos Magistraturas.

En la primera Magistratura, en la terna está su esposa Claudia Yuridia Meza Avendaño y en la magistratura III la terna está compuesta por su amigo Jesús Iván Chávez Rangel, sólo falta que los legisladores lo voten, aunque se dice que ya todo está planchado y de un momento a otro la mayoría del Poder Judicial estará en manos del Secretario General de Gobierno.

Y sigue la mata dando, en febrero del 2021, Liliana Margarita Campuzano Vega, tomó protesta como Comisionada de la Comisión Estatal para el Acceso a la Información Pública y ya se alista para ser la Presidenta de la CEAIP, al concluir su mandato José Alfredo Beltran.

Liliana Margarita, es hermana de la magistrada María Bárbara Irma Campuzano Vega, quien forma parte de los afectos de Inzunza.

Sí las estrellas sigan alineadas el próximo jueves, podría elegirse a la Fiscal carnal de Inzunza Cázares, Sara Bruna Quiñonez Estrada. Sólo falta que los diputados levanten el dedo para quedar bien con el señor.

Estos son algunos de los casos que se han ventilado, pero tenga la seguridad que si se le sigue buscando, Inzunza Cázares en un descuido y todos los puestos los acapara porque tal parece que no tiene llenadera y no hay quien le ponga un alto a su nepotismo, ni Morena mucho menos la poca oposición que hay en Sinaloa.

Estrada contra los medios de comunicación

Si se pensaba que el alcalde de Culiacán ya dejaría de actuar en contra de los medios de comunicación, pues la verdad es que se pensó mal, porque hay información en el sentido que desde su cuarto de propaganda se opera una estrategia de contención de las críticas arrojadas por la prensa.

Y es que desde nunca, a Jesús Estrada Ferreiro le ha incomodado la crítica y disfraza su intolerancia de aquel viejo traje de que los medios le inventan cosas o simplemente no citan bien sus palabras, por eso prefiere pagarle más a programas de radio que le abren el micrófono enteramente y no a medios escritos, que no logran captar su quintaesencia de esa mágica sabiduría con la que ejerce el poder municipal en Culiacán.

Por un lado, el señor alcalde siempre jura que él cumple con la ley y que respeta la Constitución, pero luego su carácter atrabiliario se enseñorea en querer voltear mentiras en verdades; como aquella en la que asegura que los descuentos que se le otorgan a pensionados, jubilados y personas con discapacidad son anticonstitucionales debido a que el artículo 28 constitucional prohíbe la exención de impuestos… pero. La verdad sea dicha, un descuento por pronto pago no es una exención.

Según el diccionario de dudas, exención significa: “Efecto de eximir a una persona de una carga, culpa, obligación o compromiso.” Es decir, la Ley de Hacienda Municipal no exenta a nadie, sólo les otorga un apoyo en forma de descuento.

Lo mismo procede para el agua potable. La Ley de Agua Potable de Sinaloa precisa que hay descuento del 50% a jubilados y pensionados que no excedan los 50 metros cúbicos de agua de manera mensual. Es decir, el marco normativo impone limitaciones.

Estrada dice respetar mucho la Ley, pero no respeta el decreto que otorga derechos salariales a policías y viudas. En otras palabras, parece que Estrada desde la distorsión su óptima, respetar la Ley es respetar sólo aquello que a él le parece justo, no la normatividad común.

Por eso, desde su oficina de comunicación, ante la imposibilidad de articular una política efectiva de informar, se prefiere la ignominia del descrédito, al trabajo bien realizado para evitar las más feroces y ramplonas críticas, como quizá pueda recaer ésta, claro, desde su óptica leguleya. Al tiempo.