/ jueves 9 de septiembre de 2021

En caballo de hacienda

Desde luego que lo ideal en cualquier deporte, es ganar y gustar. En el boxeo, hay púgiles como Floyd Mayweather, cuyo estilo simple y sencillamente es del gusto de muy pocos, pero hasta hoy esa peculiar forma de defenderse ha sido su mejor arma para convertirse en un invencible y aun cuando no es para nada espectacular, en el objetivo de ganar lo ha llevado a un pedestal casi inalcanzable. Como dice el refrán: “el fin justifica los medios”.

Pues en el futbol, es exactamente lo mismo, el máximo objetivo es ganar, no importa cómo, no por lo menos a los protagonistas y a quienes tienen que presentar cuentas, esta situación también divide a la afición, muchos se dan por satisfechos con ver ganar a su equipo, sin importar el cómo, pero otros los más exigentes, piensan que más allá de ganar, hay la obligación de ofrecer un espectáculo digno.

México, ha tenido un arranque en la eliminatoria mundialista rumo a Qatar, simplemente positivo en cuanto a los números, pues ha sacado 4 puntos en calidad de visitante, lo que lo coloca en caballo de hacienda en el objetivo primordial, pero en cuanto al espectáculo ofrecido, sin duda continúa quedando a deber.

Uno de nuestros lectores, comentó sobre el “ole, ole” que coreó en determinado momento el público panameño, cuando su equipo tocó y tocó el balón, ante la aparente complacencia del equipo mexicano, la realidad es que los canaleros pese al supuesto baile carecieron de profundidad y aparte, cayeron en el garlito de los mexicanos cuya intención de ceder terreno propició espacios para el contragolpe.

Estamos hablando de la segunda parte del encuentro, cuando los pupilos de Martino, cambiaron el chip y tras ese desgaste del “tiki, tiky”, el panorama cambio, pues los panameños desgastados por tener la pelota, pero sin profundidad alguna, poco a poco cedieron terreno terminando por ser arrinconados por los mexicanos, quienes tuvieron como mayor virtud crecer en intensidad, aunque como el rival, sin mucha profundidad, algo de lo que han adolecido en estos tres primeros juegos de la eliminatoria.

Si usted fue testigo de lo sucedido, cuente y verá que le sobran dedos de una sola mano para comprobar las acciones en las que ambos porteros fueron exigidos, especialmente el panameño. Insistimos: la tenencia de la pelota desde luego que es importante, pero si esta no reditúa en castigar el marco rival de poco o nada sirve, pero nos queda claro que los canaleros, son de los avocados a llegar a Qatar y con ellos, creemos que México, Estados Unidos y Canadá cuya selección va al alza.

A la eliminatoria le hace falta por recorrer mucho camino, pero la cosecha mexicana, sin duda le dará más confianza y en la media que Martino cuente con los mejores jugadores y que asimilen lo que pretende, el equipo mejorará su desempeño, sin asegurarlo, creemos que, a la mitad del camino, veremos a la máquina mejor aceitada y quedará en el olvido este horrible inicio desde el punto de vista estrictamente futbolístico, porque en cuanto a números todo está dicho.

El blanco de las críticas ha sido sin duda alguna Rogelio Funes Mori, pero igual, puede ser cualquier otro centro delantero mientras quienes tienen el trabajo de que lleguen balones a modo, regularmente no hacen bien su labor. Gallardo, pasó casi en blanco y Sánchez, regularmente equivocó sus envíos al área, la situación cambió un poco con el ingreso de Antuna, especialmente por combinar su habilidad y velocidad para encarar, pero no lo hizo con la frecuencia debida y del mismo modo, no fue muy atinado al momento de enviar los servicios al área.

Para la próxima convocatoria, con Jiménez, Lozano y Herrera, ya disponibles, más la experiencia de estos tres partidos, esperemos ver a México, tocar una melodía más agradable, de no ser así, no modo, a cumplir con el objetivo principal: ganar puntos, calificar lo más pronto posible y trabajar con menor presión para ir acomodando las piezas para diciembre del 2022.

Nos vemos mañana.

antoniovelazquez13@hotmail.com

Desde luego que lo ideal en cualquier deporte, es ganar y gustar. En el boxeo, hay púgiles como Floyd Mayweather, cuyo estilo simple y sencillamente es del gusto de muy pocos, pero hasta hoy esa peculiar forma de defenderse ha sido su mejor arma para convertirse en un invencible y aun cuando no es para nada espectacular, en el objetivo de ganar lo ha llevado a un pedestal casi inalcanzable. Como dice el refrán: “el fin justifica los medios”.

Pues en el futbol, es exactamente lo mismo, el máximo objetivo es ganar, no importa cómo, no por lo menos a los protagonistas y a quienes tienen que presentar cuentas, esta situación también divide a la afición, muchos se dan por satisfechos con ver ganar a su equipo, sin importar el cómo, pero otros los más exigentes, piensan que más allá de ganar, hay la obligación de ofrecer un espectáculo digno.

México, ha tenido un arranque en la eliminatoria mundialista rumo a Qatar, simplemente positivo en cuanto a los números, pues ha sacado 4 puntos en calidad de visitante, lo que lo coloca en caballo de hacienda en el objetivo primordial, pero en cuanto al espectáculo ofrecido, sin duda continúa quedando a deber.

Uno de nuestros lectores, comentó sobre el “ole, ole” que coreó en determinado momento el público panameño, cuando su equipo tocó y tocó el balón, ante la aparente complacencia del equipo mexicano, la realidad es que los canaleros pese al supuesto baile carecieron de profundidad y aparte, cayeron en el garlito de los mexicanos cuya intención de ceder terreno propició espacios para el contragolpe.

Estamos hablando de la segunda parte del encuentro, cuando los pupilos de Martino, cambiaron el chip y tras ese desgaste del “tiki, tiky”, el panorama cambio, pues los panameños desgastados por tener la pelota, pero sin profundidad alguna, poco a poco cedieron terreno terminando por ser arrinconados por los mexicanos, quienes tuvieron como mayor virtud crecer en intensidad, aunque como el rival, sin mucha profundidad, algo de lo que han adolecido en estos tres primeros juegos de la eliminatoria.

Si usted fue testigo de lo sucedido, cuente y verá que le sobran dedos de una sola mano para comprobar las acciones en las que ambos porteros fueron exigidos, especialmente el panameño. Insistimos: la tenencia de la pelota desde luego que es importante, pero si esta no reditúa en castigar el marco rival de poco o nada sirve, pero nos queda claro que los canaleros, son de los avocados a llegar a Qatar y con ellos, creemos que México, Estados Unidos y Canadá cuya selección va al alza.

A la eliminatoria le hace falta por recorrer mucho camino, pero la cosecha mexicana, sin duda le dará más confianza y en la media que Martino cuente con los mejores jugadores y que asimilen lo que pretende, el equipo mejorará su desempeño, sin asegurarlo, creemos que, a la mitad del camino, veremos a la máquina mejor aceitada y quedará en el olvido este horrible inicio desde el punto de vista estrictamente futbolístico, porque en cuanto a números todo está dicho.

El blanco de las críticas ha sido sin duda alguna Rogelio Funes Mori, pero igual, puede ser cualquier otro centro delantero mientras quienes tienen el trabajo de que lleguen balones a modo, regularmente no hacen bien su labor. Gallardo, pasó casi en blanco y Sánchez, regularmente equivocó sus envíos al área, la situación cambió un poco con el ingreso de Antuna, especialmente por combinar su habilidad y velocidad para encarar, pero no lo hizo con la frecuencia debida y del mismo modo, no fue muy atinado al momento de enviar los servicios al área.

Para la próxima convocatoria, con Jiménez, Lozano y Herrera, ya disponibles, más la experiencia de estos tres partidos, esperemos ver a México, tocar una melodía más agradable, de no ser así, no modo, a cumplir con el objetivo principal: ganar puntos, calificar lo más pronto posible y trabajar con menor presión para ir acomodando las piezas para diciembre del 2022.

Nos vemos mañana.

antoniovelazquez13@hotmail.com