/ martes 11 de diciembre de 2018

Desarman en Sinaloa estructura del viejo régimen


Desarman en Sinaloa estructura del viejo régimen

Sin ser notoria la operación política, porque muchos de los que triunfaron por Morena en Sinaloa carecen de oficio para eso, por debajo de agua y desde afuera se consuma el desmantelamiento de las principales organizaciones del PRI, de las que algunos líderes, comienzan a emigrar a las filas de quienes ostentan el poder federal y llevan de la mano a amplios segmentos militantes.

La maniobra que se activó desde la Ciudad de México, parte de personajes notables del morenismo, que anuncian que van por todo.

Curiosamente, muchos de los cabezas de ese movimiento que se encargarán de cambiar de bando a obreros, campesinos e integrantes de los sectores populares tradicionales, se identifican con el priismo, del que afirman ya no tiene remedio y del que se hartaron por sus prácticas arbitrarias.

La estrategia que no aplicaron los ex presidentes de la República, Vicente Fox Quesada ni Felipe Calderón Hinojosa, se dejó sentir de parte del Jefe del Ejecutivo Federal, Andrés Manuel López Obrador. Esa medida empezó a debilitar las bases y la influencia política de las agrupaciones que fueron parte del viejo sistema político mexicano.

Entre los sinaloenses, por ejemplo, funcionará al igual que en todas las entidades, la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México –CATEM-, que a nivel general se constituyó legalmente y preside el senador Pedro Hacer Barba.

Con mucha discreción en este territorio, e incluso con la colaboración de cetemistas, se registraron las primeras reuniones con una alta participación. La idea principal, es acabar de una vez por todas con los reductos de los cacicazgos sindicales que tanto daño causó al país.

En esa línea, es indispensable recordar que recientemente el Congreso de la Unión, destrabó la acción que por décadas los gobiernos anteriores “congelaron” para aplastar a la clase trabajadora, que se concentra en el Convenio 90 de la Organización Internacional del Trabajo.

Este enmarca, la libertad de los obreros y empleados de decidir si se afilian o no a un sindicato. Y si se quedan libres, de hoy en adelante, gozarán de las mismas garantías y prestaciones que los sindicalizados.

Por lo que en unos días, se verá ese éxodo de activos políticos y sociales que consolidarán las nuevas organizaciones, que a su vez, anuncian la desintegración del antiguo sistema político que predominó por ochenta años.

Se trata de una labor que se ejecuta de forma y de fondo.



Desarman en Sinaloa estructura del viejo régimen

Sin ser notoria la operación política, porque muchos de los que triunfaron por Morena en Sinaloa carecen de oficio para eso, por debajo de agua y desde afuera se consuma el desmantelamiento de las principales organizaciones del PRI, de las que algunos líderes, comienzan a emigrar a las filas de quienes ostentan el poder federal y llevan de la mano a amplios segmentos militantes.

La maniobra que se activó desde la Ciudad de México, parte de personajes notables del morenismo, que anuncian que van por todo.

Curiosamente, muchos de los cabezas de ese movimiento que se encargarán de cambiar de bando a obreros, campesinos e integrantes de los sectores populares tradicionales, se identifican con el priismo, del que afirman ya no tiene remedio y del que se hartaron por sus prácticas arbitrarias.

La estrategia que no aplicaron los ex presidentes de la República, Vicente Fox Quesada ni Felipe Calderón Hinojosa, se dejó sentir de parte del Jefe del Ejecutivo Federal, Andrés Manuel López Obrador. Esa medida empezó a debilitar las bases y la influencia política de las agrupaciones que fueron parte del viejo sistema político mexicano.

Entre los sinaloenses, por ejemplo, funcionará al igual que en todas las entidades, la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México –CATEM-, que a nivel general se constituyó legalmente y preside el senador Pedro Hacer Barba.

Con mucha discreción en este territorio, e incluso con la colaboración de cetemistas, se registraron las primeras reuniones con una alta participación. La idea principal, es acabar de una vez por todas con los reductos de los cacicazgos sindicales que tanto daño causó al país.

En esa línea, es indispensable recordar que recientemente el Congreso de la Unión, destrabó la acción que por décadas los gobiernos anteriores “congelaron” para aplastar a la clase trabajadora, que se concentra en el Convenio 90 de la Organización Internacional del Trabajo.

Este enmarca, la libertad de los obreros y empleados de decidir si se afilian o no a un sindicato. Y si se quedan libres, de hoy en adelante, gozarán de las mismas garantías y prestaciones que los sindicalizados.

Por lo que en unos días, se verá ese éxodo de activos políticos y sociales que consolidarán las nuevas organizaciones, que a su vez, anuncian la desintegración del antiguo sistema político que predominó por ochenta años.

Se trata de una labor que se ejecuta de forma y de fondo.