/ sábado 12 de septiembre de 2020

Aniquilar las tecnologías en secundarias técnicas

Escuelas secundarias técnicas,

semilleros del porvenir,

en tus aulas forjan los técnicos,

que engrandecen a nuestro país

Ma. Carmen Molina

Estudiar la educación secundaria en nuestro país nos lleva a pensar en un abanico de posibilidades. Existen al menos cuatro modalidades: las federales, las telesecundarias, las estatales y las técnicas, cada una con sus características peculiares. Elegir una escuela en este nivel educativo de la educación básica en terrenos del rubro público conduce al padre de familia a decidirse por un centro escolar cercano a casa por obvias razones, pero no necesariamente. Cuando se tienen diversas opciones; los padres pueden decidirse por aquella que consideran que será mejor para su hijo; no únicamente que ayude a subir un escalón educativo sino también que sea capaz de aprender “algo” que pueda servirle para la vida, muchos apuestan por una formación tecnológica en una Secundaria Técnica.

La diferencia existe también en los presupuestos de origen: estatales o federales. Abordaremos la crisis que están pasando la asignatura de tecnología en las Secundarias Técnicas Federalizadas. Las reformas educativas desde el 2011 han venido afectando duramente las horas destinadas a la formación de la educación tecnológica de los jóvenes que decidieron cursar en una “Técnica” de tener nueve horas divididas para la teoría, práctica y producción, se fueron reduciendo a seis módulos, en el caso de los docentes que se jubilaban, dejaban espacio en alguna escuela con esta asignatura, los nuevos contratos fueron remplazados por docentes que cubrían tres horas a la semana por grupo, recogiéndose o sacando de presupuesto el resto de horas. Imagínese plantillas con escuelas donde se tienen docentes con diferentes cargas horarias unos con nueve, algunos con seis y otros con tres. Hasta para elaborar horarios para los subdirectores y coordinadores de tecnología se vuelve caótico, porque tienen que cuadrarlo con el resto de asignaturas.

La reforma del 2011 impactó duramente en los planes y programas de estudio pero los Jefes de Enseñanza del área de Tecnología como el profesor Aurelio Rodríguez quien labora en la Zona 05 de Secundarias Técnicas y ese tiempo la asesora técnica pedagógica la maestra Carmen Osuna junto con otros profesores y con el apoyo del supervisor Alejandro Córdova y otros aliados de todo el Estado, buscaron la forma de que no se perdiera. Defender la tecnología porque es una característica de pertenencia, un distintivo del servicio educativo que ofrecen las Secundarias Técnicas, de cierta manera se logró rescatar a las tecnologías.

Una reforma en la política educativa fue la asesina certera que vino a darle un golpe mortal a las “tecnologías” “Nueva reforma del 2017” dándole al traste con la implementación de la “autonomía curricular” dañando seriamente a la asignatura llamada “tecnología” lastimando el motor, el espíritu de las Secundarias Técnicas en la historia de la educación en México. En esa ocasión los profesores de tecnologías se adaptaron, tratando de encajar pero no dependía de la buena voluntad del colectivo del área de tecnología sino gran parte del nivel de logro obtenido en el examen PLANEA, de la infraestructura física y humana hasta de un puntaje que el sistema educativo enviaba y determinaba qué Clubes podía ofertar a sus alumnos; así que si la escuela salía con bajo logro académicos tenía que enfocar todas sus energías, (esto fue durante la gestión de Aurelio Nuño) sus esfuerzos al fortalecimiento curricular de las áreas que evalúa el sistema educativo nacional e internacional: lenguaje y comunicación y habilidades matemáticas, así que un maestro que impartió muchos años: pesca, procesamientos de alimentos, turismo, soldadura, agricultura, apicultura, acuacultura, diseño arquitectónico, diseño industrial, instalaciones eléctricas, máquinas y herramientas, pecuarias entre otras tecnologías debían tener un club enfocado a la lectura, escritura y matemáticas. En el 2018 llegó una nuevo gobierno por lo tanto también una visión nueva para la perspectiva educativa; sin embargo, las tecnologías regresarían con el la visión del 2011, por lo menos se sabía que frente a grupo se podría trabajar con el perfil que había sido contratado y regresaría a su asignatura de origen.

La pandemia ha obligado a que se realicen ajustes en el mapa curricular dos asignatura con: Formación, Cívica y Ética para los jóvenes de primer grado, anteriormente sólo la cursaban segundo y tercer grado y vida saludable para los tres grados. Los profesores de tecnología (al menos en la zona escolar donde laboro) jamás imaginaron un nuevo golpe para su carga horaria: tres horas frente a grupo sin destinar más horas para la práctica y la producción, genera de nuevo incertidumbre y molestia en el colectivos de docentes encargados de estas áreas. La pesadilla regresó en este arranque de ciclo escolar 2020-2021.

Antes de todas esas reformas maquiladas desde hace casi catorce años atrás en Secundarias Técnicas existían ámbitos de especialización muy definidos para cada escuela. Esa esencia sigue formando parte de su identidad, del reconocimiento entre la comunidad, es un rasgo de la personalidad del centro educativo frente a las otras escuelas. Una Técnica 5, los mazatlecos la conocen como la ETI s 5,77, 81 y 88 su enfoque es industrial y comercial. Las secundarias técnicas: 32 de Aguaverde, 36 de Isla del Palmito del Verde, 57 de Escamillas son conocidas como ETAs, su característica es ser una técnica agropecuaria y forestal. Las secundarias 7 de Mazatlán y 8 de Teacapán, pocos las nombran como “Técnica 7 o Técnica 8”, todos la conocemos por ser pesqueras.

Muchos jóvenes que egresaron de estas Secundarias Técnicas y no tuvieron la oportunidad de estudiar la preparatoria, usaron esa especialización técnica para emprender un pequeño negocio o ganarse la vida. Otros, les gustó tanto su experiencia que continuaron y buscaron bachilleratos afines como un CBTIS, CETMAR o CBTA para continuar especializándose con la semilla tecnológica que les plantaron en la educación secundaria. En algunos ha sido tanta la pasión que han optado por carreras universitarias del corte tecnológico.

Es triste ser testigo de la lenta agonía, de la aniquilación de una asignatura que aporta una visión distinta de todas las que conforman el mapa curricular para la educación secundaria. Los talleres, los campos agrícolas de tecnología extrañarán el griterío, las sonrisas, la creatividad e innovación de los jóvenes, porque tres horas semanales no son suficientes para cultivar una verdadera educación tecnológica en Secundarias Técnicas Federalizadas. El secretario estatal de educación y el federal deberían sentarse a dialogar con los profesores de tecnología, porque no se vale que un plumazo venga a restarle valor a una asignatura que forma parte del sentido de pertenencia e identidad de las escuelas secundarias técnicas.

Escuelas secundarias técnicas,

semilleros del porvenir,

en tus aulas forjan los técnicos,

que engrandecen a nuestro país

Ma. Carmen Molina

Estudiar la educación secundaria en nuestro país nos lleva a pensar en un abanico de posibilidades. Existen al menos cuatro modalidades: las federales, las telesecundarias, las estatales y las técnicas, cada una con sus características peculiares. Elegir una escuela en este nivel educativo de la educación básica en terrenos del rubro público conduce al padre de familia a decidirse por un centro escolar cercano a casa por obvias razones, pero no necesariamente. Cuando se tienen diversas opciones; los padres pueden decidirse por aquella que consideran que será mejor para su hijo; no únicamente que ayude a subir un escalón educativo sino también que sea capaz de aprender “algo” que pueda servirle para la vida, muchos apuestan por una formación tecnológica en una Secundaria Técnica.

La diferencia existe también en los presupuestos de origen: estatales o federales. Abordaremos la crisis que están pasando la asignatura de tecnología en las Secundarias Técnicas Federalizadas. Las reformas educativas desde el 2011 han venido afectando duramente las horas destinadas a la formación de la educación tecnológica de los jóvenes que decidieron cursar en una “Técnica” de tener nueve horas divididas para la teoría, práctica y producción, se fueron reduciendo a seis módulos, en el caso de los docentes que se jubilaban, dejaban espacio en alguna escuela con esta asignatura, los nuevos contratos fueron remplazados por docentes que cubrían tres horas a la semana por grupo, recogiéndose o sacando de presupuesto el resto de horas. Imagínese plantillas con escuelas donde se tienen docentes con diferentes cargas horarias unos con nueve, algunos con seis y otros con tres. Hasta para elaborar horarios para los subdirectores y coordinadores de tecnología se vuelve caótico, porque tienen que cuadrarlo con el resto de asignaturas.

La reforma del 2011 impactó duramente en los planes y programas de estudio pero los Jefes de Enseñanza del área de Tecnología como el profesor Aurelio Rodríguez quien labora en la Zona 05 de Secundarias Técnicas y ese tiempo la asesora técnica pedagógica la maestra Carmen Osuna junto con otros profesores y con el apoyo del supervisor Alejandro Córdova y otros aliados de todo el Estado, buscaron la forma de que no se perdiera. Defender la tecnología porque es una característica de pertenencia, un distintivo del servicio educativo que ofrecen las Secundarias Técnicas, de cierta manera se logró rescatar a las tecnologías.

Una reforma en la política educativa fue la asesina certera que vino a darle un golpe mortal a las “tecnologías” “Nueva reforma del 2017” dándole al traste con la implementación de la “autonomía curricular” dañando seriamente a la asignatura llamada “tecnología” lastimando el motor, el espíritu de las Secundarias Técnicas en la historia de la educación en México. En esa ocasión los profesores de tecnologías se adaptaron, tratando de encajar pero no dependía de la buena voluntad del colectivo del área de tecnología sino gran parte del nivel de logro obtenido en el examen PLANEA, de la infraestructura física y humana hasta de un puntaje que el sistema educativo enviaba y determinaba qué Clubes podía ofertar a sus alumnos; así que si la escuela salía con bajo logro académicos tenía que enfocar todas sus energías, (esto fue durante la gestión de Aurelio Nuño) sus esfuerzos al fortalecimiento curricular de las áreas que evalúa el sistema educativo nacional e internacional: lenguaje y comunicación y habilidades matemáticas, así que un maestro que impartió muchos años: pesca, procesamientos de alimentos, turismo, soldadura, agricultura, apicultura, acuacultura, diseño arquitectónico, diseño industrial, instalaciones eléctricas, máquinas y herramientas, pecuarias entre otras tecnologías debían tener un club enfocado a la lectura, escritura y matemáticas. En el 2018 llegó una nuevo gobierno por lo tanto también una visión nueva para la perspectiva educativa; sin embargo, las tecnologías regresarían con el la visión del 2011, por lo menos se sabía que frente a grupo se podría trabajar con el perfil que había sido contratado y regresaría a su asignatura de origen.

La pandemia ha obligado a que se realicen ajustes en el mapa curricular dos asignatura con: Formación, Cívica y Ética para los jóvenes de primer grado, anteriormente sólo la cursaban segundo y tercer grado y vida saludable para los tres grados. Los profesores de tecnología (al menos en la zona escolar donde laboro) jamás imaginaron un nuevo golpe para su carga horaria: tres horas frente a grupo sin destinar más horas para la práctica y la producción, genera de nuevo incertidumbre y molestia en el colectivos de docentes encargados de estas áreas. La pesadilla regresó en este arranque de ciclo escolar 2020-2021.

Antes de todas esas reformas maquiladas desde hace casi catorce años atrás en Secundarias Técnicas existían ámbitos de especialización muy definidos para cada escuela. Esa esencia sigue formando parte de su identidad, del reconocimiento entre la comunidad, es un rasgo de la personalidad del centro educativo frente a las otras escuelas. Una Técnica 5, los mazatlecos la conocen como la ETI s 5,77, 81 y 88 su enfoque es industrial y comercial. Las secundarias técnicas: 32 de Aguaverde, 36 de Isla del Palmito del Verde, 57 de Escamillas son conocidas como ETAs, su característica es ser una técnica agropecuaria y forestal. Las secundarias 7 de Mazatlán y 8 de Teacapán, pocos las nombran como “Técnica 7 o Técnica 8”, todos la conocemos por ser pesqueras.

Muchos jóvenes que egresaron de estas Secundarias Técnicas y no tuvieron la oportunidad de estudiar la preparatoria, usaron esa especialización técnica para emprender un pequeño negocio o ganarse la vida. Otros, les gustó tanto su experiencia que continuaron y buscaron bachilleratos afines como un CBTIS, CETMAR o CBTA para continuar especializándose con la semilla tecnológica que les plantaron en la educación secundaria. En algunos ha sido tanta la pasión que han optado por carreras universitarias del corte tecnológico.

Es triste ser testigo de la lenta agonía, de la aniquilación de una asignatura que aporta una visión distinta de todas las que conforman el mapa curricular para la educación secundaria. Los talleres, los campos agrícolas de tecnología extrañarán el griterío, las sonrisas, la creatividad e innovación de los jóvenes, porque tres horas semanales no son suficientes para cultivar una verdadera educación tecnológica en Secundarias Técnicas Federalizadas. El secretario estatal de educación y el federal deberían sentarse a dialogar con los profesores de tecnología, porque no se vale que un plumazo venga a restarle valor a una asignatura que forma parte del sentido de pertenencia e identidad de las escuelas secundarias técnicas.

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