De momento, Álvaro Ruelas Echave, que goza del privilegio de dirigir la Secretaría de Desarrollo Social del Gobierno del Estado, se niega a encuadrar la lente de su mirada hacia el 2021. Asegura estar concentrado en el trabajo diario que desprende hacia la gente un alto sentido humano.
Tiene una idea muy clara de no hacer futurismo político y de que acompañará al gobernador Quirino Ordaz Coppel, hasta que como autoridad lo mantenga en el cargo. “Porque mañana puede uno no estar en el puesto”, expone.
Está consciente de que muchos desde afuera ven en esta Secretaría, un espacio para el despegue de una carrera política. Sin embargo, reconoce que además de las acciones que se desenvuelven en favor de las familias y en contra de la pobreza, te colocan en los “ojos de todos”
Todos vigilan lo que se hace y no se hace y ello entraña una constante y silenciosa lucha por la sobrevivencia política. Luego, entre la plática, se recuerda la caída de su antecesor, Raúl Carrillo, a quien la entrega de colchones en mal estado, de parte de sus subordinados a damnificados de septiembre 2018, lo hizo caer como en una especie de efecto dominó que lo azotó.
Y admite que de la silla que ocupa salieron los candidatos a la gubernatura Jesús Aguilar Padilla y Mario López Valdez. Pero eso no lo descontrola. Exhibe que cada instante es de tiempo y circunstancias.
Trae en mente que no desea caer en un conflicto de aspirar a una candidatura de las que se jugarán en dos años más y luego que no prospere porque no son sus tiempos. Y sobre todo, centra sus días y sus esfuerzos en servir a la gente y en sentir la satisfacción de que le puedes cambiar la vida a una familia, al hacer algo por ella.
El mochitense afirma que todos los días hay mucho en que ocuparse y que en esa relación de afecto y de respeto que comparte con el gobernador Quirino Ordaz Coppel, es complicado seguirle el ritmo al mazatleco. Es positivo, que desde las cuatro de la madrugada el Ejecutivo ya anda en pie. Te llama y te busca y te dá encomiendas que también dá gusto atender. Es un hombre muy generoso, revela.
“Hacemos las cosas como le agrada. Atendemos directamente a las personas y andamos por tierra y donde se encuentra el pueblo”, complementó. Es parte de un gobierno que se dedica de tiempo completo a resolver los problemas de los sinaloenses. No hay hora para pensar en otras cosas o en proyectos políticos. Y si los habría, apuntarían hacia el Congreso del Estado”, vislumbró.
Posteriormente desechó que tenga dificultades políticas con su actual jefe por tener una relación de respeto con el ex gobernador Mario López Valdez. Es algo que no está en duda.
Álvaro Ruelas Echave, acepta que la Secretaría de Desarrollo Social es la institución que más vínculos crea con los pobladores. A la que concurren para solucionar sus demandas a tal grado que hasta el corte del jueves 25, otorgaron 169 mil servicios que tuvieron 56 mil 225 beneficiarios, vía Jornadas Puro Sinaloa.
De ese tamaño es la influencia política y social que tiene la Sedeso, que encabeza el ex alcalde entre integrantes de un gabinete en el que no hay celos sino de colaboración y esfuerzos. Evidentemente, que no le quita el sueño, rumbo al proceso electoral en que se renovarán la Cámara local de Diputados, las 18 alcaldías y la gubernatura.
El abrazo de Judas David-Ferreiro.
El alcalde de Culiacán, Jesús Estrada Ferreiro y el dirigente del Sindicato de Trabajadores al Servicio del Ayuntamiento, David Alarid Rodríguez, pusieron a circulación una fotografía que atestigua la primera reunión que se enmarca en el conflicto patrón-trabajadores, con un abrazo más helado que un iceberg.
