/ martes 16 de marzo de 2021

A Chivas le salió barato

Dice un dicho: “lo que se ve, no se juzga”. Pero bueno, tratándose de fútbol, desde luego que se presta simplemente para ratificar el dicho. El América, fue infinitamente superior a las Chivas Rayadas del Guadalajara, que como equipo dejó mucho que desear. A esto solo se le podría agregar que el 3-0 le salió barato porque las Aguilas tuvieron, por lo menos, la posibilidad de lograr un par más y nos quedamos cortos.

El Rebaño Sagrado, resultó un flán que motivó al regocijo de los aficionados americanistas, al respecto, nuevamente debemos recordarles que exactamente llevaban el mismo paso la temporada anterior y que el ganar el clásico ni para uno ni para otro, es el máximo objetivo, representa eso sí, el orgullo de imponerse en el juego más importante tratándose de esta añeja rivalidad, pero no se compara con obtener el máximo galardón.

Sostengo, que es mucho más importante esto último y por lo visto, no vemos como el chiverio pueda aspirar a ello de continuar en el mismo tenor. Vimos a un equipo sin garra, sin alma, sin cohesión que desde luego, hace suspirar a los aficionados del equipo de Coapa, pero si usted es de los que analizan los duelos, mucho más allá de un resultado, si su análisis es imparcial, se habrá dado cuenta que el América tiene que mejorar en varios aspectos para poder combatir en una liguilla, ante equipos como Cruz Azul, Tigres, Monterrey y el León, pese a que este atraviesa por una mala racha, pero que ayer dejó claro que está por entrar en mejor ritmo.

Hace muy bien el técnico americanista en ponderar el triunfo por lo que representa el clásico, pero al mismo tiempo señaló que no es como para echar las campanas al vuelo. Los equipos arriba señalados, cuentan con planteles más completos, tienen mejores hombres en calidad de relevos, situación que en juegos de liguilla suele ser determinante.

Nos da gusto que jugadores mexicanos como Henry Martín, pasen por buen momento. El yucateco, pese a sus limitaciones técnicas, tiene la capacidad para estar siempre en el lugar que le corresponde a un auténtico centro delantero, ahora los cronistas lo llaman “punta”, copiando el léxico argentino, pero difícilmente encontrará tantas facilidades como la que le dieron las Chivas. Ni por asomo lo vemos en Europa, pero merece un lugar en la selección sin duda alguna, se lo ha ganado a pulso.

Un aficionado me envió esto: “Chivas. La versión más lastimera de un equipo desestructurado en todas sus líneas. Sin ideas claras, evidenció ser un equipo de muy bajo nivel futbolístico, Además, mostró un equipo técnico distópico al momento de hacer los cambios”. En cuanto al América comenta: “en un juego deslucido, el América ganó con un mediocre juego que lo salvó el caótico juego de Chivas”.

Nada que agregar, opiniones similares, algunas cargadas de coraje e impotencia nos manifestaron y con justa razón puesto que se puede perder, pero hay que ver el punto de los “comos”, porque Chivas, de plano, ni las manos metió. El equipo cuenta con jugadores de gran calidad, son los mismos que llegaron a la liguilla y dejaron fuera al América, de ahí que la pregunta es: ¿Qué sucede al interior del equipo al grado tal de cambiar tanto de la noche a la mañana?

En lo personal, ya lo he manifestado, Chivas por siempre, pero no me quita ni mi tranquilidad, ni el sueño. Ya lo dije, se trata de un juego no de una guerra. Ahora a ver los juegos de Champions, el preolímpico y los amistosos de la selección mayor. Ah! Y el pendiente entre Tigres y Pachuca.

Dice un dicho: “lo que se ve, no se juzga”. Pero bueno, tratándose de fútbol, desde luego que se presta simplemente para ratificar el dicho. El América, fue infinitamente superior a las Chivas Rayadas del Guadalajara, que como equipo dejó mucho que desear. A esto solo se le podría agregar que el 3-0 le salió barato porque las Aguilas tuvieron, por lo menos, la posibilidad de lograr un par más y nos quedamos cortos.

El Rebaño Sagrado, resultó un flán que motivó al regocijo de los aficionados americanistas, al respecto, nuevamente debemos recordarles que exactamente llevaban el mismo paso la temporada anterior y que el ganar el clásico ni para uno ni para otro, es el máximo objetivo, representa eso sí, el orgullo de imponerse en el juego más importante tratándose de esta añeja rivalidad, pero no se compara con obtener el máximo galardón.

Sostengo, que es mucho más importante esto último y por lo visto, no vemos como el chiverio pueda aspirar a ello de continuar en el mismo tenor. Vimos a un equipo sin garra, sin alma, sin cohesión que desde luego, hace suspirar a los aficionados del equipo de Coapa, pero si usted es de los que analizan los duelos, mucho más allá de un resultado, si su análisis es imparcial, se habrá dado cuenta que el América tiene que mejorar en varios aspectos para poder combatir en una liguilla, ante equipos como Cruz Azul, Tigres, Monterrey y el León, pese a que este atraviesa por una mala racha, pero que ayer dejó claro que está por entrar en mejor ritmo.

Hace muy bien el técnico americanista en ponderar el triunfo por lo que representa el clásico, pero al mismo tiempo señaló que no es como para echar las campanas al vuelo. Los equipos arriba señalados, cuentan con planteles más completos, tienen mejores hombres en calidad de relevos, situación que en juegos de liguilla suele ser determinante.

Nos da gusto que jugadores mexicanos como Henry Martín, pasen por buen momento. El yucateco, pese a sus limitaciones técnicas, tiene la capacidad para estar siempre en el lugar que le corresponde a un auténtico centro delantero, ahora los cronistas lo llaman “punta”, copiando el léxico argentino, pero difícilmente encontrará tantas facilidades como la que le dieron las Chivas. Ni por asomo lo vemos en Europa, pero merece un lugar en la selección sin duda alguna, se lo ha ganado a pulso.

Un aficionado me envió esto: “Chivas. La versión más lastimera de un equipo desestructurado en todas sus líneas. Sin ideas claras, evidenció ser un equipo de muy bajo nivel futbolístico, Además, mostró un equipo técnico distópico al momento de hacer los cambios”. En cuanto al América comenta: “en un juego deslucido, el América ganó con un mediocre juego que lo salvó el caótico juego de Chivas”.

Nada que agregar, opiniones similares, algunas cargadas de coraje e impotencia nos manifestaron y con justa razón puesto que se puede perder, pero hay que ver el punto de los “comos”, porque Chivas, de plano, ni las manos metió. El equipo cuenta con jugadores de gran calidad, son los mismos que llegaron a la liguilla y dejaron fuera al América, de ahí que la pregunta es: ¿Qué sucede al interior del equipo al grado tal de cambiar tanto de la noche a la mañana?

En lo personal, ya lo he manifestado, Chivas por siempre, pero no me quita ni mi tranquilidad, ni el sueño. Ya lo dije, se trata de un juego no de una guerra. Ahora a ver los juegos de Champions, el preolímpico y los amistosos de la selección mayor. Ah! Y el pendiente entre Tigres y Pachuca.